PRI, FUTURO SOMBRIO (RR aclara supuesto desvío de recursos)

TAREA PUBLICA
Por: Carlos OROZCO GALEANA

Las insatisfacciones y los jaloneos internos en el  Pri nacional no son gratuitos.  Fue sacudido en la elección pasada y no pocos apuestan a que si no se  reorganiza en democracia y evade  hacer un análisis objetivo de lo que le pasó y corrige su proceder, difícilmente recuperará su papel protagónico.

Parece que de momento libró una insurrección impulsada por Ulises Ruiz, un político muy desprestigiado por el deficiente desempeño que tuvo como gobernador de Oaxaca, lo que según el comité nacional, lo invalida para incitar un cambio que corresponde solo a los priístas auténticos y no a los traidores como ese insurrecto.

Ni siquiera sus enemigos esperaban una debacle del Pri en la elección pasada. Perder  las ocho  gubernaturas en juego, es indicativo de una gran crisis interna y de una  percepción cabal del electorado que, en gran porcentaje, sigue aún molesto por la forma corrupta en que gobernó Enrique Peña Nieto, quien ni suda ni se acongoja y anda últimamente muy risueño haciéndola de novio simpático demostrando con creces lo que le importa el otrora partidazo.

Cuando llegó a la presidencia del Pri Alejandro Moreno,  pensé que se había elegido a un personaje muy cuestionado, de dudosa credibilidad, pues sus bienes declarados no correspondían a sus   ingresos. Como dice la mayoría de políticos cuando no puede explicar   su súbito enriquecimiento, la cuantía patrimonial de Moreno según  dijo éste fue por   haber recibido herencia de familiares. Si Chuy. De esa manera, el Pri fue presa fácil de Morena, al enfrentar a un partido dirigido por  alguien muy cuestionado. Pura miel para Morena. También influyó el hecho, al interior de su partido, que Amlito entregó candidaturas a su hijo, a comadres y familiares cercanos. Igual hizo su secretaria general, Carolina Viggiano.  Y sigue el Pri por esa vereda de incomprensión hacia la militancia, que observa con azoro que Amlito es todo un gandalla.

Así, en vez de reaccionar, el Pri sigue en las mismas. Lleva meses en la miseria. Tiene que armonizar las corrientes que buscan la recuperación. Por un lado, está la propuesta de refundación y por la otra, la de mantener la legalidad para ser contrapeso al poder del presidente López Obrador. Y una tercera,  la de Ulises Ruiz, que busca la renuncia de Moreno y la de todo el comité nacional, como condición previa a sentar las bases de un nuevo destino.

La experiencia dictamina, en democracias modernas, que cuando un partido es derrotado con amplitud en elecciones, renuncia su presidente y toda la plantilla partidista; luego, sacan cuentas. Se trata de que nuevos personajes, con ideas nuevas, hagan trabajo de recuperación para regresar lo más pronto posible a la arena electoral con posibilidades de ganar otra vez el poder. Eso no está ocurriendo en el Pri.

Y es que la vieja guardia priísta no quiere hacerse a un lado, ignora  que gran parte de la sociedad la detesta por su pasado truculento. Son muchos millonarios los que  conviven en las alturas del Pri,  y todos  los conocemos. Muchos años en el poder, además, desgasta a cualquiera.  Actualmente, ese tipo de personajes  (Emilio Gamboa, Manlio Fabio Beltrones, José Narro, Luis Videgaray, entre otros ), se han replegado esperando mejores tiempos y seguro que se dedican a administrar sus pingues negocios logrados a la sombra del poder. La mayoría de esa vieja guardia, acumuló riquezas y es dueña de grandes empresas ( petroleras, farmacéuticas),  y no es infrecuente que  le hallen cuentas millonarias en paraísos fiscales.

Por otra parte, Amlo metió mucho ruido en el tricolor y en las bancadas al convocar  al Pri a sumarse a su partido para establecer mayoría parlamentaria y operar distintas reformas faltantes, lo que generó más división interna. Amlo es un canijo que ya olió la sangre de su otrora partido y sabe que el Pri está disminuido por la gran derrota que se llevó  y qué mejor tiempo que apoyarse en él para facilitar los proyectos pendientes de la 4T.

El tiempo se le viene encima al tricolor. Tiene ante sí una definición que pesará en su presente y lo perfilará en el futuro. Ha de escoger entre ser “colaborador” del régimen o constituirse en una oposición real.

La otra disyuntiva es si continúa su ruta  con la actual dirigencia derrotada, desprestigiada, o si  se decide a perfilar otra solución que pase por la apertura, por  la inauguración de una época nueva que implique prácticas democráticas totales y la participación de dirigentes y personas prestigiadas, sin cola que les pisen, en  las representaciones estatales .

Por ahora, el Pan le está comiendo la tostada; con base en pleitos de callejón, ha perfilado ser partido más oposición que el Pri y se enfrenta todos los días a Morena queriendo ser ubicado como una alternativa real para la sucesión del 2024.

ROGELIO RUEDA: NO SOY COMO LOS OTROS

Circula en las redes una carta que el manzanillense envió al actual presidente del Pri ( que no tuvo respuesta, según se ),  en la que afirma que es falso que él haya puesto  recursos del Pri a su nombre y que por lo tanto “no se incurrió en desvío alguno”. Esa mención puede ser un error y  una afirmación no dolosa, expuso Rueda Sánchez.

Es importante esa aclaración en cuanto se desmiente  una transferencia  de recursos que supuestamente se hizo, porque  se involucra la honra ajena al darse  a pensar que hubo alguna conducta ilegal. Es positiva también porque Rueda Sánchez está prácticamente debutando como notario público y ha de gozar de la confianza de los ciudadanos. Por lo demás, aprecio que este “round” es motivado por la mala relación  existente entre personajes de dos corrientes políticas distintas a las  que pertenece cada uno de los involucrados.  Por lo demás, siendo un buen abogado Rogelio, pienso que no enlodaría su prestigio haciendo cosas indebidas. Tan, tan. . . .