Días negros para la ciencia

EL ARCÓN DE HIPATIA
Por: Saraí AGUILAR ARRIOZOLA

La semana pasada, diferentes colectivos y organismos de la sociedad civil dieron la batalla contra la desaparición de los fideicomisos, la cual se perdió ante el apoyo totalitario de la bancada de Morena en el Senado.

Durante esta batalla, un grupo de más de 700 científicos de todo el mundo de universidades como Harvard, Oxford, Yale, Cambridge, Stanford y el MIT firmaron un manifiesto en apoyo a los fideicomisos de ciencia mexicanos.

El escrito, titulado “Carta en apoyo de los científicos mexicanos”, reclamó a los legisladores que “reconsideren su apoyo al proyecto para evitar la extinción de los fideicomisos” (EFE).

Asimismo, ProCiencia, que es una red de científicos, investigadores, médicos y académicos de todo el país, manifestó su descontento, pues dijo que tales fideicomisos sustentan el trabajo de los CPIs (Centros Públicos de Investigación) lo que provocaría una reducción a nuevas investigaciones.

“La desaparición de los fondos mencionados y de los fideicomisos que sustentan el trabajo de los CPIs reduciría sustancialmente los recursos para hacer investigación y formar nuevos investigadores”, apuntaron en un comunicado.

Lo sorprendente no fue que los legisladores, apegados más a la línea oficial que a la tarea de legislar, los desaparecieran, a pesar de la opinión de los expertos, sino que la titular de Conacyt, la doctora María Elena Álvarez-Buylla diera el espaldarazo para ello.

Para dimensionar el daño: en el caso de Conacyt, son 65 fideicomisos los que desaparecerán, de los cuales 26 eran de Centros de Investigación, 18 más estaban destinados a proyectos como el Fondo para la Protección de Personas Defensoras de Derechos Humanos y Periodistas, entre otros, cuya suma alcanza por sí sola 25 mil 741 millones de pesos. (Infobae)

A pesar de que la titular de Conacyt insista en que se continuará el apoyo a la ciencia, los números la contradicen.

En 2018, México destinó a ciencia y tecnología un presupuesto equivalente al 0.41 por ciento del Producto Interno Bruto (PIB), según un análisis presentado por el Centro de Estudios de las Finanzas Públicas, con base en datos del Banco Mundial y del Programa de Desarrollo Humano 2019. Y para 2021, el Congreso federal contempla 179 mil 257.1 millones de pesos. Esto representa menos que este año (179 mil 705.2 millones). (El Informador Mx).

La batalla se perdió. Sin duda, octubre fue un mes negro para la ciencia mexicana. El mismo mes en el que el Congreso de la Unión extinguió los fideicomisos para ciencia, tecnología e innovación y el Fondo para el Cambio Climático, falleció el Nobel de Química mexicano Mario Molina, un defensor de aquellos instrumentos.

AL FONDO DEL ARCÓN

La presunta corrupción de los fideicomisos aún está pendiente de ser demostrada, pero eso no obsta para sumar estereotipos a las acusaciones. Estereotipos que esta vez fueron reforzados por Álvarez-Buylla, quien para referirse a Ana Díaz Aldret, doctora en Sociología e investigadora del CIDE y SNI II, la nombró como “la esposa del director de Conacyt”. Reforzar un prejuicio de género suena más a intento de aniquilación que a búsqueda de justicia.

 

 

Columna publicada con la autorización de @saraiarriozola