Punto (.) Rojo

“LOS PERFILADORES”, LOS CEREBROS DE MORENA

Andrés Manuel López Obrador, en su doble rol, el de presidente electo de los Estados Unidos Mexicanos y el de líder moral de su partido político, el Movimiento de Regeneración Nacional (Morena), ha encontrado una forma muy discreta para vigilar y evaluar a todos los actores políticos que se mueven en su órbita.

A lo largo y ancho del país, ha diseminado a un grupo de intelectuales, analistas y estudiosos del comportamiento político y social a los que se identifica con el mote de “Perfiladores”.

Son hombres seleccionados y entrenados por el propio López Obrador para tener un termómetro exacto de lo que sucede con los actores políticos y los representantes populares emanados de su partido político. Hasta donde se sabe, en el estado de Colima, el futuro presidente tiene a dos perfiladores, los dos, hombres cultos, tienen doctorados en diversas áreas de las ciencias sociales, hablan diferentes idiomas, son profundamente discretos, se mueven en el bajo perfil y lo más importante, los dos proporcionan información, todos los días, al teléfono rojo de López Obrador.

En las células políticas de Morena en Colima todos saben de la existencia de los perfiladores. El presidente del partido, Sergio Jiménez Bojado; los dos senadores, Joel Padilla y Griselda Valencia; las dos diputadas federales, Indira Vizcaíno Silva y Claudia Yáñez Centeno; los 15 diputados locales que ganaron la elección y los cuatro presidentes municipales que resultaron triunfadores el primero de julio.

Insistimos, todos, absolutamente todos, saben de la existencia de esos dos perfiladores, pero nadie, absolutamente nadie, sabe quiénes son. Esas dos personas son los ojos, oídos, el olfato y en síntesis, todos los sentidos políticos que tiene López Obrador en Colima. Y todos saben que tienen más poder que cualquiera de los que ganaron un puesto en los comicios de hace ocho semanas.

Y se sabe que, quizás de estos perfiladores, han surgido algunos datos que han encendido los focos de alerta en el Comité Ejecutivo Nacional de Morena. En México les preocupa el protagonismo de Vladimir Parra, quien asume posturas fascistas refugiándose en las siglas de Morena.

Y les preocupa también que la alcaldesa electa de Manzanillo, Griselda Martínez, tenga cercanía con algunos militantes del Partido Revolucionario Institucional. Les preocupa también el activismo de Indira Vizcaíno, a quien muchos ven ya con el traje de precandidata para la sucesión del 2021. Les preocupa, en sobremanera, el poco conocimiento que muchos de los diputados electos tienen del complejo mundo de la política. Y les intriga, también, la cercanía que muchos de los legisladores electos en Colima muestran con el régimen del gobernador José Ignacio Peralta Sánchez.

Insistimos, nadie sabe quiénes son, pero todos saben de su existencia. Los perfiladores son los dos representantes de Morena más poderosos que tenemos en Colima, porque ambos obedecen a los intereses, exclusivamente, de Andrés Manuel López Obrador. Su figura está muy por encima del presidente del partido, de los senadores, de los diputados federales y de la delegada del Gobierno Federal. Nadie sabe si son hombres, si son mujeres, pero en Morena, todos están convencidos de que el futuro de ese partido pasa por los informes que proporcionen esos dos personajes al próximo presidente de la República.

Y un dato importante: El papel de los perfiladores es el de buscadores de talentos. Saben que muchos de los representantes electos de Morena fracasarán en sus encargos políticos y administrativos. Por eso, ya están buscando a la generación 2021 de Morena. Y ahí, aparecerán muchos priístas y panistas a los que sus respectivos partidos nunca les dieron la oportunidad de competir en el mercado electoral.

La misión de los perfiladores es quirúrgica para el futuro de corto plazo: Que los inconformes del PRI y el PAN alimenten las arterias de Morena. Lo que hizo López Obrador en el 2018 pero a escala Colima en el 2021. Parece que los panistas y priístas despreciados serán la fortaleza del Movimiento de Regeneración Nacional en la próxima elección. Pero bueno, como siempre tenemos que insistir en la tesis de que eso, sólo parece.

MIS POSTDATAS DE ESTE DÍA

P. D. 1.- Dicen los que saben que habrá cambio en la Secretaría de la Juventud. Gamaliel Haro se aletargó en su trabajo político y ahora buscan un sustituto para la titularidad de esa dependencia. Suenan con insistencia dos nombres: Fernando Cruz, “El Pollo”, y el del joven empresario manzanillense Gonzalo Sánchez Ríos. Cualquiera de los dos sería buena opción: Fernando, un activo leal al mil por ciento al gobernador Ignacio Peralta, y Gonzalo, parte de la sangre nueva del PRI en Manzanillo.

P. D. 2.- Un dato que debemos tener presente para el futuro: Francisco Yáñez Centeno, hermano de César, el hombre más cercano a López Obrador, ha dicho en muchas ocasiones que su sueño es ser gobernador de Colima. Y hace más de dos décadas, cuando fue delegado de la Reforma Agraria, tuvo como director Administrativo de la dependencia a un hombre que será clave en el 2021: Virgilio Mendoza Amezcua. Dejamos el dato sobre la mesa, pero es tiempo de ir viendo cómo viene la partida de ajedrez.

P. D. 3.- Quizás el delegado federal más exitoso es David Rodríguez Brizuela, de la Comisión Nacional Forestal. Ha dado resultados, y lo más importante, es un tipo institucional en toda la extensión de la palabra. Si el PRI tiene ganas de recuperar Tecomán en el futuro de corto plazo, “El Conejo” tiene la llave para hacerlo. No hay que olvidar que fue, durante muchos años, el hombre de más confianza de Gustavo Alberto Vázquez Montes.
Y ni una línea más.