El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, ha escapado muchas veces en su larga carrera política de las garras de la Justicia y está convencido de que esta vez será igual.
Un día después de que se convirtiera en el primer mandatario acusado de prostitución de menores, por lo que será sentado en el banquillo de los acusados a partir del próximo 6 de abril, mostró su rostro más sonriente y afirmó que no está “para nada preocupado”.
Berlusconi descartó en todo momento que vaya a presentar su dimisión y vaya a convocar elecciones anticipadas “para no dañar más la imagen de Italia”.
El mandatario derechista, que reiteró a los periodistas que no iba a hablar del caso Ruby: “Por amor a la patria no hablo de eso. Sólo puedo decir una cosa: no estoy preocupado en absoluto”, dijo.
Tras romper un silencio de 24 horas, Berlusconi explicó por qué se muestra tranquilo luego de contar que la noche del martes, sus socios de gobierno de la federalista Liga Norte “me mostraron su cercanía durante toda la velada en el palacio Grazioli”, su residencia en Milán.
“Estamos más cohesionados que nunca. Creo que pronto tendremos 325 diputados en el Parlamento [necesario para gobernar]. La mayoría sigue adelante tranquila, acabaremos el periodo natural de la legislatura”, declaró.
Despojado de inmunidad. Tras ser despojado por el Tribunal Constitucional de las leyes que él mismo confeccionó para evitar ser juzgado por las numerosas acusaciones que pesan sobre él, Berlusconi deberá a partir de abril hacer frente a varios juicios, empezando con el caso Ruby, por dos delitos que sumarían hasta 15 años de cárcel: el de prostitución de menores y el de cohecho (abuso de poder).
Nuevas filtraciones de la fiscalía de Milán
Silvio sabía desde marzo de 2010 que Ruby era menor de edad
La delicada situación del primer ministro italiano se agravó ayer por la filtración de los interrogatorios de los fiscales milaneses a Ruby. Según publica El País en su edición digital, la joven marroquí declaró el 3 de agosto a la Fiscalía que Berlusconi le entregó “un sobre con 50 mil euros” la primera noche que acudió a Villa San Martino, el 14 de febrero de 2010. “Me llevó a una habitación donde nos quedamos solos. Me dijo que mi vida cambiaría y, aunque no me habló explícitamente de relaciones sexuales, no era difícil entender que me estaba proponiendo hacer sexo con él”.
Según Ruby, en ese momento Berlusconi pensaba que tenía 24 años y era egipcia, porque eso es lo que ella le contó “falsamente”. Pero eso cambió en marzo: “Vuelvo a Arcore y hablando con las otras chicas invitadas, me entero de que las que están con él, con Silvio, pueden acceder a una casa gratis con cinco años de renta pagada”.
Y añade Ruby: “Cuando (Berlusconi) me propuso poner a mi nombre la casa le dije la verdad: que era menor y no tenía documentos”. En ese momento, sostiene la joven, Berlusconi le dijo. “Dirás a todos que eres la sobrina de Mubarak y así podrás justificar los recursos que pondré a tu disposición”.
El seguimiento de las llamadas telefónicas demuestra que Ruby estuvo en Arcore quince noches distintas, y que habló con Berlusconi por el celular 67 veces en 77 días. Entre esas ocasiones, la joven pasó en villa San Martino, sin interrupción, un fin de semana largo, entre el 24 y el 26 de abril, en el que hubo un invitado ilustre: Vladimir Putin, el primer ministro ruso. Las visitas acabaron el 2 de mayo, tres semanas antes de que Ruby fuera detenida en Milán acusada de robo.
Con información de Agencias.
