El depuesto presidente de Túnez fue sentenciado a 15 años y medio de prisión después de ser declarado culpable de contrabando de drogas, armas y piezas arqueológicas en el juicio en ausencia más reciente en su contra.
Un tribunal también impuso una multa de 72 mil dólares al ex gobernante Zine el Abidine Ben Alí.
El nuevo proceso se sumó al efectuado hace dos semanas, en el que el depuesto líder y su esposa fueron sentenciados a 45 años de cárcel y al pago de multas por 64 millones de dólares por diversos cargos, entre ellos malversación de fondos.
Ben Alí gobernó Túnez con puño de hierro durante dos décadas hasta el 14 de enero, cuando huyó a Arabia Saudí debido a una protesta popular en su contra que se extendió un mes y que inauguró una oleada de movilizaciones para conseguir mayores libertades políticas en el Medio Oriente.
Las autoridades sauditas se han abstenido de responder a la solicitud de extradición del ex mandatario presentadas por Túnez, cuyo nuevo Gobierno ha procedido con los juicios.
Ben Alí afirmó en un comunicado que las joyas y armas por las que se le acusa eran obsequios de jefes de estado y que el dinero y las drogas fueron sembrados.
El ex presidente tiene abogados extranjeros, pero la ley tunecina impide a los defensores de otros países representar a clientes procesados en ausencia. Como resultado, el tribunal designó como defensores de Ben Alí a los abogados Hosni Beji, Abdsatar Messaoudi y Bechir Mahfudhi.
Con información de AP
