El comité organizador de los Juegos Olímpicos de Londres 2012 deseaba contratar al baterista de la banda The Who, Keith Moon, quien falleció en 1978, para que actuara en la clausura de la justa deportiva.
Bill Curbishley, «manager» de la banda, contó al diario «The Times» que contestó por correo a la organización de los Juegos Olímpicos con estas palabras: «Les expliqué que Keith reside ahora en el crematorio de Golders Green.
«Si tienen una mesa redonda, unos vasos y unas velas, podríamos ponernos en contacto con él», haciendo referencia a que sólo con una sesión de espiritismo sería posible hablar con el famoso baterista fallecido.
Curbishley comentó que con diplomacia les explicó que Moon no podría tocar en la ceremonia de clausura, el 12 de agosto próximo, «hizo honor a la frase de The Who: «Espero morir antes de envejecer»».
En enero de 2011 la revista británica «Q» nombró a Keith Moon como el Mejor Baterista de la Historia. La publicación considera que con su talento había logrado dar protagonismo a los bateristas que hasta entonces estaban considerados como simples acompañantes musicales.
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