Ana Guevara: una gestión que desmotiva

EL ARCÓN DE HIPATÍA 
Por. Saraí AGUILAR ARRIOZOLA

Acabaron las Olimpiadas y con ello, el corte de caja no resulta favorecedor a la directora general de la Conade, Ana Guevara.

La otrora deportista olímpica se retiró como velocista en 2008 asegurando estar asqueada de la corrupción. Hoy, como integrante del gobierno de la Cuarta Transformación, ella es una de las principales señaladas de lo mismo que reprochaba.

En su gestión surgieron polémicas por los procesos de selección en los que varios deportistas señalaron favoritismos o denunciaron ser excluidos por no manifestar su apoyo a la dirigente.

Asimismo, se publicaron reportajes periodísticos relacionados con actos de corrupción, en medio de una política de austeridad que terminó por aniquilar el poco apoyo que los deportistas tuvieron en el país previo a los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Los resultados están a la vista.

A los atletas nada podemos recriminar. Han hecho su máximo esfuerzo sin apoyo ni de quien debería velar por sus intereses. Mientras Guevara finiquitaba el Fondo para el Deporte de Alto Rendimiento, Alexa Moreno, la joven que logró llegar a posiciones en la gimnasia olímpica nunca alcanzadas por una mexicana, tuvo que costear sus propios aparatos para entrenar y llegar a Tokio.

Claro, tampoco podemos dejar a Ana Guevara el nada honorable papel de haber actuado en solitario al retirar apoyos a los deportistas. Cabe recordar que ella se alineó a los designios presidenciales externados por la bancada de Morena, en el que se acusaba a los fideicomisos de ser “cuna de corrupción” y por ende, el dinero destinado en el presupuesto al gasto en dichos apoyos se reintegraría a la federación para financiar los programas sociales del Gobierno Federal.

Lo cierto es que, hasta el momento, la Conade no ha señalado si habrá un nuevo apoyo dirigido al deporte. Y de la reintegración del dinero tampoco se sabe nada.

Las quejas no son exclusivas a Tokio. La campeona paralímpica de lanzamiento de bala María de los Ángeles Ortiz, el medallista mundial de clavados Jahir Ocampo, los nadadores Melissa Rodríguez y Jorge Iga, así como el halterista Bredni Roque, cuarto lugar en Río 2016, compartieron sus preocupaciones rumbo a la máxima justa deportiva durante una reunión virtual con la Comisión de Deportes de la Cámara de Diputados que preside Ernesto Vargas (Récord).

“Desde hace un año no he tenido contacto con Conade, no sé qué va a pasar, se han mandado mensajes y nada de nada; ni sé quién sea mi jefe directo, no sé quién sea el jefe de alto rendimiento, pues no hay prácticamente nada. No hay un sistema, no hay organización, cada deportista está jalando por su propio rumbo”, dijo Ocampo

¿De verdad esto la motiva a Ana Guevara? Al menos ella eso alardeó a manera de sorna ante sus críticos. “Sus ofensas me motivan” aseguró en Twitter.

¿Cuánto más tendrán los deportistas que soportar su gestión opaca y polémica? ¿Acaso la 4T seguirá cobijando la corrupción de la Conade por tratarse de una de las suyas?

A 13 años de su retiro, corroboramos sus palabras: es de asco la corrupción en el deporte. Puede que a Ana Guevara las ofensas la motiven. Pero al deporte, su gestión lo mata.

 

 

Columna publicada con la autorización de Saraí AGUILAR