COESPRIS CUMPLE ( Tiene reconocimiento nacional por sus proyectos estratégicos )
Por: Carlos OROZCO GALEANA
La Secretaría de Salud y Bienestar Social del Gobierno del Estado a través de la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios, ha realizado cerca de 7 mil visitas a establecimientos esenciales y no esenciales de la entidad, para la mitigación de la pandemia por el coronavirus Covid-19.
Esa ha sido una labor callada fruto del alto nivel de responsabilidad de directivos, profesionales de diversas disciplinas y trabajadores en general de ese sector. Colima está resolviendo las dificultades que exige la pandemia del coronavirus y el resto de tareas que tiene que hacer esa área que tiene por cabeza al prestigiado galeno Antonio Ochoa Meillón, de larga y fructífera trayectoria en el sector salud y quien es apoyado por un conjunto de profesionales.
Durante estos operativos que se realizan en coordinación con Protección Civil y los 10 ayuntamientos, difundió la agencia noticiosa Colima Noticias, se verifica que no estén operando establecimientos no esenciales y se difunden las medidas de prevención en los esenciales para que cumplan con las medidas sanitarias.
“A la fecha, se han efectuado 6 mil 284 visitas, de las cuales mil 127 han sido a expendios de alimentos, mil 168 a establecimientos de fabricación de arneses eléctricos no esenciales y mil 039 a negocios no esenciales, de los cuales mil 023 suspendieron actividades por iniciativa propia y 16 fueron suspendidos por la autoridad sanitaria.
Asimismo, “se han visitado 829 consultorios médicos, 735 vendedores ambulantes, 415 tiendas de autoservicio, 295 plantas purificadoras de agua, 240 mercados públicos y tianguis, 161 restaurantes, 159 farmacias, 110 funerarias y 101 estancias infantiles, asilos de ancianos y clínicas de adicciones, entre otros establecimientos”.
Como se deduce, estas labores están en consonancia con la exigencia de cuidar la salud de los colimenses. Muy bueno que haya fracasado la visión gubernamental de que los mexicanos somos muy responsables y cumplimos la ley y que la supervisión de actividades vitales, como la que hace COESPRIS, no es necesaria. Pamplinas. Debe aplicarse la ley, no se puede ser blando cuando está en juego la salud pública, así sean muy grandes los intereses que se le oponen.
Como revelan aquellas cifras, Coespris ha cuidado la salud de los colimenses en esta hora tan difícil. Ha mostrado el máximo interés para que el virus encuentre muchas dificultades para expandirse y esto significa un alto nivel de confianza en que las autoridades sanitarias saben hacer muy bien su trabajo. De hecho, Coespris Colima está catalogada como un área de salud que goza del reconocimiento nacional por los resultados que obtiene regularmente en la aplicación de sus programas estratégicos.
En esta tarea vital de protección de nuestra salud, ha sido importante la colaboración de establecimientos diversos que, a costa de no generar ingresos, han preferido cooperar y encontrado mil maneras de facilitar intercambios comerciales haciendo gala de un nivel de conciencia muy satisfactorio para todos al exigir cubre bocas a los clientes, mascarillas de plástico o evitando roces corporales en la entrega de productos.
Y es que todos debemos cooperar en esta hora aciaga. Primero está la salud y luego la economía, y no al revés como pregonan mandatarios esclavos del capitalismo que presionan fuertemente para que se levanten las restricciones a costa de poner en riesgo la salud de millones de personas. Hablo de Donald Trump y Jair Bolsonaro a quienes no les importa el incremento de decesos en sus países y sí la economía.
Tenemos que llegar a un alto nivel de conciencia en el cuidado de nuestra salud. Los tiempos ya cambiaron. Un descuido y llega la fatalidad, sobre todo en personas adultas mayores que están en peligro permanente si padecen enfermedades crónicas.
Se requiere solidaridad social en su máxima expresión, amor en los hogares. Las condiciones actuales obligan a todos a una normalidad nueva, a ordenar nuestros hábitos eliminando los negativos, a trabajar con más ahínco, a extremar precauciones y cuidados en la familia. A comunicarnos mejor y protegernos entre todos.
