SOCIALIZANDO DATOS / Expectativas de seguridad

Por: Balvanero Balderrama García

No es una preocupación menor. Vemos, en prensa, en estadísticas oficiales, de análisis, por comentarios en redes sociales y de tertulias varias, que los delitos de robo van a la alza.

Nos percatamos que no únicamente se buscan viviendas con ausencia de los moradores para desvalijar, sino que esos delitos, robos, van reclamando sitios cada vez más concurridos y en horas que anteriormente eran impensadas; en espacios céntricos para la vida económica y lúdica de la población, como la Av. Sevilla del Río, Av. San Fernando, V. Carranza, Madero, así como en diversas plazas comerciales.

De ser espacios preferidos las tiendas de conveniencia y las gasolineras, las del horario de 24 horas, en las madrugadas, se ha cambiado el modus operandi a: cualquier hora es buena. Desde robos de “dame lo que traigas”, a tener tan bien estudiadas a las víctimas que saben quién sale de los atestados bancos con sumas considerables de dinero, para seguirles y robar, por ejemplo.

Las casas habitación no se escapan, como lo comentamos líneas arriba, a esta ola creciente de crímenes al patrimonio; ni los abarrotes, minisupers, estéticas y todo donde, quienes delinquen, vean una oportunidad; no sólo algún objeto olvidado en la banqueta o porche de la casa, sino que se pueden dar a la tarea de arrancar un medidor de agua, por citar un caso del que me enteré recién.

En esta dinámica, no importa, muchas de las veces, la integridad de las personas a quienes se roba; el ejemplo más reciente, fijo en el imaginativo colectivo en Colima, está en el joven Germán, ultimado de una manera incomprensible, sin motivo ni razón, en el contexto de un robo.

El próximo 17 de este mes, el INEGI difundirá, de acuerdo a su calendario, los resultados para el segundo trimestre 2019, de la Encuesta Nacional de Seguridad Pública –ENSU-. Son siete las temáticas que ahí se nos ofrecen: percepción, sensación de inseguridad, expectativas sobre la delincuencia, condición de atestiguamiento, fuentes de información sobre el tema, cambios de rutina, percepción de desempeño de autoridades, conflictos y conductas antisociales, desempeño gubernamental.

La información se ofrece a nivel nacional y por ciudades, para el caso de la entidad están Colima y Manzanillo.

Existe la presunción de que en un amplio porcentaje las y los delincuentes no son atrapados. Ello, posiblemente, alienta a otros en ese camino.

La expectativa sobre la delincuencia a nivel nacional fue la siguiente en el primer trimestre (ENSU, 2019): mejorará 34.4%; seguirá igual de bien 9%; seguirá igual de mal 32.8% y empeorará 22.2 por ciento. Para la ciudad de Colima los porcentajes fueron: mejorará 31.8; seguirá igual de bien 6.0; seguirá igual de mal 37.1 y empeorará 24.7, una expectativa menos optimista con respecto al promedio nacional.

Manzanillo, por su parte, manifestó que: mejorará 40.3; seguirá igual de bien 8.5; seguirá igual de mal 34.0 y empeorará 16.0, valores que muestran una expectativa más positiva que en Colima y el País.

* Para quienes toman sus vacaciones de verano, estudiantes, docentes y personal administrativo de los diferentes planteles educativos, que tengan placenteros días, que valoren y disfruten el ocio –hay quienes descansan haciendo adobes-, y que su regreso sea con bien.

*Y el mayor de los éxitos para quienes terminaron niveles educativos y esperan resultados de admisión al siguiente, así como para quienes concluyeron y buscarán espacios laborales y rumbo a sus vidas.

balvanero@gmail.com