El rector Miguel Ángel Aguayo López inauguró las II Jornadas Académicas que vuelven a reunir a profesores de todos los planteles universitarios, pero ahora para reflexionar en torno al tema de la evaluación docente. Ambas autoridades señalaron los cambios que han hecho en los últimos años con el propósito de mejorar y fortalecer la docencia en la Universidad de Colima.
Son las convocatorias y contrataciones de nuevos maestros por oposición y no por orden directa, las once carreras que ya obtienen doble grado, el 94 por ciento de los docentes con estudios de posgrado (maestría o doctorado) y la creación de la Dirección General de Desarrollo de Personal Académico, algunas de las nuevas acciones que inician esta transformación.
Reunidos en el auditorio “Alberto Herrera Carrillo” de la Facultad de Ciencias Políticas y Sociales, participan aproximadamente 250 profesores, 136 procedentes de los planteles del nivel medio superior y 120 de pregrado y posgrado.
Adriana Mancilla Margalli, directora de la Escuela de Filosofía, enlistó de manera resumida las reflexiones e inquietudes generadas en las I Jornadas Académicas, hace un año. Reflexiones que ahora se busca darles continuidad en esta ocasión, dijo la maestra, “con resultados concretos que beneficien nuestras prácticas docentes”.
El ejercicio de hace un año vertió las inquietudes en torno al deber ser del docente y la docencia, la realidad y consideración institucional, la administración versus docencia, diversificación de los perfiles docentes en la institución, evaluación del desempeño del profesor de tiempo completo y del docente así como capacitación y actualización.
Mancilla Margalli hizo notar que hace muy poco que la presencia de una importante cantidad de mujeres al frente de escuelas y facultades, propició proyectos comunes a partir de su condición de mujeres, y tal escenario originó estas jornadas “que ahora se extienden a toda la institución y para beneficio de todos quienes vivimos en ella”.
Por su parte, el rector Miguel Ángel Aguayo López, habló del crecimiento que la Universidad de Colima ha tenido en matrícula, infraestructura física y docente, destacó principalmente el crecimiento cualitativo que se generó en los últimos años.
También habló de los logros cuantitativos, como el 94 por ciento del profesorado que tiene un posgrado, “lo que nos dio un primer lugar nacional, también se habilitó a profesores con el grado de maestría y doctorado, y la incorporación de muchos de los docentes al SNI y PROMEP”.
Dijo que todo esto se generó gracias al esfuerzo personal de cada profesor y a la habilitación federal. Destacó que el otorgamiento de plazas será sólo a través de los órganos colegiados, una tendencia que deberá seguir la Universidad de Colima después de la sucesión rectoral.
El secretario académico de la Universidad de Colima, Juan Carlos Yáñez Velazco, agradeció la asistencia de buena fe de todos los docentes, a quienes reconoció como participantes vitales del proceso de transformación en la reforma educativa que vive la U de C. “La participación de los profesores no garantiza el éxito, pero la transformación no se puede hacer sin los profesores”.
Yáñez Velazco comunicó a los maestros universitarios que “estamos cambiando” y que esto es evidente porque se lanzó la primera convocatoria para profesores de tiempo completo y de media superior, ya existen 11 programas académicos de doble grado, se creó la Dirección General de Desarrollo de Personal Académico y, dijo, “estamos por primera vez discutiendo estos temas con toda la libertad”.
Volvió a solicitarles a los docentes su acompañamiento vigilante pero comprometido y responsable en este proceso de transformación, señaló, “porque no vamos a hacerlo sólo nosotros desde las oficinas”. Mencionó también que tienen una agenda pendiente de las pasadas jornadas.
La primera conferencia magistral estuvo a cargo del experto en psicología y políticas educativas, Mario Rueda Beltrán, quien ofreció las características del panorama de la evaluación del desempeño docente realizada recientemente a nivel regional. Antes reconoció en la Universidad de Colima a una institución no común porque le dedica tiempo al tema de la docencia, cuando otras están más preocupadas por el conocimiento.
“Creo que por este esfuerzo va el sentido de caminar con solidez, y para fortalecer la investigación como función al interior de las universidades”, señaló. Rueda Beltrán, quien a su vez recomendó incrementar la participación de estudiantes y profesores, la documentación sistémica, calidad en las prácticas de evaluación, autorregulación, compromiso con la calidad, actitud permanente de perfeccionamiento y auto exigencia para acercarse a las metas. {jathumbnail off}
