La Revolución no es como la pintan: Noé Guerra

A cien años del inicio de la Revolución Mexicana, en las aulas se enseña que fue el comienzo que cambió el rumbo de nuestro país, pero no todo fue como se enseña.

Aquella metamorfosis social y política que el pueblo solicitaba en busca de un bien colectivo y democrático, puede que no haya sido del todo favorable.

Se buscaba una mejor educación, sindicalismo, la presión internacional en la creación de las instituciones, fueron algunos de los temas buscados dentro del movimiento revolucionario.

No obstante para Noé Guerra Pimentel, presidente de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos, una Revolución implica cambio, pero para él, la realidad es que en 1910 el movimiento armado fue una mascarada, es decir un escenario montado, a final de cuentas la Revolución como tal nunca fue.

Y es que señaló que educativamente han hecho creer que los participantes en la lucha armada son grandes héroes revolucionarios.

“En realidad fueron viles asesinos”, asegura el historiados para AFmedios.

“Así los héroes de la Revolución: Venustiano Carranza mató a Emiliano Zapata; Álvaro Obregón asesinó a Venustiano Carranza y Francisco Villa; Plutarco Elías Calles mató al Álvaro Obregón; mientras que Plutarco Elías Calles se salva porque Lázaro Cárdenas lo corrió de México”.

Explica que en 1910 nace en México el movimiento con un Francisco I. Madero, quien no tenía ninguna idea de la Revolución.

Según Guerra Pimentel, lo que deseaba Francisco I. Madero era, como hacendado y beneficiado por el porfiriato, el relevo en el poder, sin una visión clara de un estado diferente.

Porfirio Díaz estuvo en la presidencia durante 35 años, en los que se alcanzó un logro importante a nivel social, político y económico.

En ese tenor el ingeniero químico, maestro en economía, doctor en administración Macario Schettino, con elementos comparativos señala que hace 100 años, México tenía una economía cuatro veces mejor que la de Japón.

Hoy el país se encuentra 4 veces menor que el país nipón, lo que habla de baja en el aspecto económico.

Ahora bien, el rector de la UNAM, José Narro Robles, habría expresado con la conmemoración de los 200 años de Independencia y 100 de la Revolución Mexicana, el problema del analfabetismo en México es serio.

Ya que en cifras 5.9 millones de mexicanos no saben leer ni escribir.

“México con su libre mercado, sistema educativo nacional, no ha podido sobre pasar la condición que tenía hace cien años”, apunta Guerra Pimentel.

Además desde su punto de vista, es aberrante que en México se tengan a varios de los hombres más ricos del mundo, mientras la mitad de la población del país no tiene ni para comer, lo cual además implica la falta de salud, recreación y transporte.

 

LA ´REVO´ DEBIO CONCLUIR EN 1911

El cronista detalla que el movimiento armado, aplicándose datos duros, debió haber concluido el 21 mayo de 1911, con la renuncia de Porfirio Díaz.

Pero tras la incógnita ¿por qué siguió?.

“La respuesta se debe a que Francisco I. Madero no tuvo la capacidad, debido a que gobernó con los mismos “malos”, lo que con toda posibilidad fue un error”.

El movimiento social no dejó saldos positivos y en cuestión de democracia ésta surgió como concepto pero no ha sido concretada, esto a partir de que siguen disponiendo los dueños del poder y sólo que generan escenarios que la ciudadanía cree, expresó Guerra Pimentel.

“En temporalidad la Revolución no termina en 1921, ya que no puede terminar por decreto como tampoco se puede hacer una guerra”.

Guerra Pimentel dice que en el área de desarrollo, la Revolución no ha registrados saldos buenos, ya que la oligarquía imperante en aquella época gobierna en estos momentos al país, es decir los apellidos de hace 100 años ocupan los mismos espacios de poder en este momento.

“Los grupos conservadores mexicanos amparados y protegidos por la Iglesia Católica siguen gobernándonos y eso es grave porque ubica al país en un enorme atraso”, detalla.

 

NINGÚN ‘HÉROE’ QUISO HACER UN CAMBIO

Para el cronista colimense, ninguno de los presuntos héroes de la Revolución quiso hacer un cambio y ejemplifica:

Francisco I. Madero: Hacendado producto del porfiriato, no propuso cambio, él jamás pensó en los campesinos.

Victoriano Huerta: Un militar del porfiriato, que se avergonzaba de su origen.

Venustiano Carranza: Un prominente político del porfiriato auspiciado con Estados Unidos en su combate contra Huerta. La Constitución que plantea Carranza es la aplicación con ciertas reformas de la Constitución de 1857 que había hecho letra muerta Porfirio Díaz durante 35 años en convivencia con el Estado Católico

Francisco Villa (Doroteo Arango): Bandolero con enorme carisma, quizá uno de los pocos que pensaron en beneficiar a las clases más pauperizadas del país

Emiliano Zapata: Con visión en micro, referido sólo en el ámbito donde él se desarrollaba geográficamente, en la región de Morelos.

Álvaro Obregón: Un ranchero producto del porfiriato, que no propuso ningún cambio.

Plutarco Elías Calles: No propuso cambio y sólo se dedicó a perseguir al clero Católico.

Lázaro Cárdenas: Que llega con otra visión y acaba con los caudillos literalmente; expulsa a Calles y surge el llamado Estado Moderno, pero que cometió una serie de errores como la reforma agraria y la creación de los «ejidos» en el agro mexicano, lo que propicio pauperizar más al campo. Los campesinos se quedaron callados y emigraron a Estados Unidos (razón por la que hay braceros desde los años 40´s).

Se crea un partido político – partido de estado  Partido Nacional Revolucionario (PNR) antecesor del Partido Revolucionario Institucional (PRI): que empieza de manera lamentable con muchos dirigentes que empiezan a desconocer en la práctica los logros de la Revolución Mexicana.

 

CENTENARIO PARA REFLEXIONAR

Guerra Pimentel, destaca que el Centenario debe servir para reflexionar y olvidar, a partir  de ahí replantear y quitar las “franquicias” que han sido impuestas por grupos religiosos, empresariales y sindicalistas, quienes se comprometan con el estado nación mientras se les está yendo de las manos.

Lo cual se ve difícil ya que nadie quiere ceder su parcela de poder, por lo que afirma que la sociedad debe ser crítica, juiciosa y en ese sentido severos para votar  y ver quien gobernará

“Estamos así porque así queremos estar (…) nos negamos a plantearnos a futuro”, agrega el historiador.

LAS MUERTES DE ANTES. LAS MUERTES DE HOY

Lo grave de todo es que existe el mito que en la Revolución hubo un millón de muertos, lo cual, afirma Guerra Pimentel, es falso, ya que en realidad fueron 500 mil personas que perecieron en campos de batalla, por influenza y hambre.

100 años después y a cuatro años del gobierno de Felipe Calderón, en la llamada “guerra contra el narcotráfico”, van 30 mil muertos con todo y familiares, lo que es considerado como una revuelta armada, más no revolución.

Afirma el presidente de la Sociedad Colimense de Estudios Históricos que México tiene una situación complicada:

“Estamos en una guerra, en la cual todos somos enemigos de todos y el rey es el que trae un arma, es lamentable (…), el presidente de la República, Felipe Calderón, abre una guerra contra el narco, sin decirnos dónde estamos y de pronto volteamos y nos vemos en medio”.

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