TAREA PUBLICA
Por: CARLOS OROZCO GALEANA

Este mes último de la gobernación, está siendo fatídica para el gobernador Ignacio Peralta Sánchez que cosecha en su sembradío sexenal un alud de críticas por su desempeño pésimo.

En una expresión muy popular, “no está muriendo  a besos”, pues en su cometido usó  el estilete de  la indiferencia para hendirlo en las carnes de la conciencia ciudadana, de la democracia misma,  de la rectitud y la congruencia, y desconsideró algo  tan vital para los políticos  como el saludar, como el ser franco y agradable, como el mostrar siquiera  buenos modales.   Hay quienes afirman que lo están dejando solo sus allegados, pero yo digo que él los apartó primero.

Esa noción de “no morir a besos”, se usa cuando una persona ha cometido un daño contra otra, y luego la vida la pone en una situación equivalente. Así, este refrán representa cómo la sabiduría popular entiende el principio de reciprocidad o de causa y efecto. Y envuelve un cierto sentido de justicia, de manera que también puede ser usado como una advertencia ante alguien que ha cometido un daño pero que aún no está a tiempo de sufrir las consecuencias.

Escribo este artículo por el atrevimiento de IPS, quien dijo que la vida se ha ensañado con él. Muchos ciudadanos ya le han indicado que mintió.   Y es que IPS ha sido un afortunado de la vida, no un desdichado, ha vivido rodeado del amor familiar y de una economía en bonanza los últimos tiempos. Su sobresaliente formación universitaria  lo indica. Desde muy joven partió de Colima a  estudiar  en una acreditada institución de educación superior mexicana como el ITAM, alma máter de  políticos que acompañaron  a Enrique Peña Nieto, y  fueron jefaturados por Luis Videgaray, el padrino que Ignacio, en su “infortunio”, se encontró en el camino para ser gobernador. O sea, fue suertudo y  beneficiario del dedazo de las alturas, lo que obligó a otros precandidatos interesados, más sensibles y con más derechos que él, como Rogelio Rueda,   a allanarse ante la decisión presidencial.

Posteriormente al curso de  su licenciatura, fue aceptado por una universidad extranjera para cursar una maestría en Essex, Inglaterra, donde coincidió con diversos políticos que lo impulsaron en su carrera.  Lo hizo gracias a una beca  que pocos mexicanos pueden disfrutar. ¿  Hasta aquí la vida o alguien se había ensañado con él ? Pamplinas!

Luego de desempacar del Reino Unido, laboró en el Banco de México al frente de una Unidad de Monedas, para posteriormente trasladarse a su estado natal gracias a la invitación que le hizo Gustavo Vázquez Montes para que ocupara la Secretaría de Fomento Económico, donde Ignacio demostró sus conocimientos y sus altas cualidades académicas.  En este desempeño, mostró, sin embargo, carencias humanitarias en el trato cotidiano con sus colaboradores a los que ignoraba o saludaba  ocasionalmente ( cuando no le quedaba de otra, seguramente). Era un “ser extraño”, me confiaron en ese entonces.

De ahí brincó a la presidencia municipal de Colima respaldado por Silverio Cavazos, donde dejó mucho que desear pues viajó de más fuera de México y se desentendió de sus deberes. Mi querido amigo Abelardo Ahumada, recordó en las redes sociales, el 4 de este mes, su  pronóstico en el sentido de que si había sido mal alcalde sería mal gobernador. Acerté por desgracia, dijo.

Sin embargo, la suerte le seguía sonriendo a este colimense y pudo lograr, otra vez por la intervención de sus amigos, ser colocado como candidato a senador al frente de la fórmula priista, situación que se vino abajo por acuerdos de paridad de género. Luego, fue rescatado por Videgaray y nombrado al frente de una comisión en la campaña de Peña Nieto que lo catapultó como subsecretario de Comunicaciones. ¿  La vida seguía enseñándose con él? Pamplinas!

El brinco a la gubernatura fue trámite de niños. Era y es muy poderoso el Grupo Atlacomulco, que reclamaba territorio para los negocios en Manzanillo y pedía a gritos un gerente que encontró en la persona del colimense. La participación de ese grupo la podría aclarar la Auditoría Superior de la Federación o la Unidad de Inteligencia de la SHCP si es que se atreven los de arriba a averiguar esa cuestión.

Es así que nos encontramos ya con IPS gobernador.  A la mayoría ciudadana no le quedó de otra, enfrente tenía él un contrincante desacreditado que, sin embargo, le dio un buen susto (JLPR). Yo creí como muchos que por sus credenciales académicas, Peralta Sánchez sería buen gobernante. Alguien dedicado al estudio, tan disciplinado y aparte honesto, pensaba yo ingenuamente,  no podría defraudarnos.  Por si las dudas, el presidente López Obrador estimó que hacer estudios en el extranjero no garantiza que esos mexicanos harán un buen papel como servidores públicos. Exacto, presidente, muchos  terminarán siendo devorados por el poder y corrompidos hasta la médula.    En Colima  viven más  personajes de esa calaña.

El caso es que se volvió caótico el final político de este gobernador. Qué le deparará el destino? El columnista de El Universal, Salvador García Soto, fue muy lejos al comentar  atrevidamente en su articulo del 29 de septiembre pasado que el presidente Andrés Manuel  López Obrador “tiene la convicción” de acusar con todas las formalidades de ley, por peculado y enriquecimiento ilícito a tres gobernadores, Silvano Aureoles, de Michoacán, Jaime Rodríguez  de Nuevo León, y a Ignacio Peralta luego que terminen sus encargos. Según él, Indira Vizcaíno estaría ayudando a Amlo haciéndole llegar información comprometedora acerca de posibles conductas  ilícitas cometidas durante su mandato.

Aclaro que no soy más ingenuo y dudo  que esa acción se lleve al cabo hasta sus últimas consecuencias porque hasta hoy el presidente solo ha asustado con el petate del muerto a sus opositores.  Ha tenido que  invitar a su gobierno a los gobernadores salientes de Sinaloa  y de Nayarit y a algunos otros después para  probar que la justicia del régimen no es selectiva, cuando se atreva a llevar a juicio a los prevaricadores.

Y en relación a este último punto, podría ser (como que estoy soñando) que el extremo de la hebra comience con el trámite de juicio político que un grupo de diputadas y diputados de la legislatura saliente exigió mediante solicitud de juicio político en contra del gobernador y del exsecretario de planeación y Finanzas, Carlos Arturo Noriega García, actual diputado en funciones.

Brenda Gutiérrez Vega, secretaría general  del Congreso,  explicó que a esa solitud se le dará trámite, pero ha resultado que los realizados en la materia solo han sido históricamente  circos bien organizados como inútiles. Seguro no me equivocaré nuevamente. . .