A un año del terremoto en Haití, la población trata de superar dicho trauma de alguna forma. Una buena opción es el deporte, por ello un grupo de discapacitados decidió enfrentarse en un partido de fútbol.
Lo destacable de este choque es que ambos equipos jugaron con muletas y todos los participantes perdieron sus extremidades durante el sismo del 12 de enero de 2010. A pesar de que la pobreza y el cólera azotan Puerto Príncipe, muchos optan por olvidarse de los problemas.