Colima.- El delegado de la Procuraduría de Protección al Ambiente (Profepa), Ciro Hurtado Ramos, precisó que las comunidades de Picila y Tepames, en Colima, así como los municipios de Ixtlahuacán y Coquimatlán registran una mayor incidencia en caza furtiva.
Detalló que en este mes de mayo se detuvo a seis personas por poseer carne y huevos de tortuga marina, así como iguanas, las cuales son consideradas especies animales protegidas por la Profepa en Colima.
Hurtado Ramos mencionó que entre las especies más vulnerables se encuentra el venado cola blanca, la iguana, el jabalí, la tortuga marina y el delfín. Afirmó, en ese sentido, que se realizan operativos extraordinarios para la detención de cazadores furtivos en el estado.
“Obviamente tratamos de llevar la prevención de estas actividades platicando con las personas de los ejidos y los comisariados para ver la posibilidad de que el habitante de la localidad no incurra en la ilegalidad a través de la caza furtiva”.
Informó que la delegación de la Profepa en Colima recibe a las especies salvajes dañadas o que son decomisadas a particulares, después se las canaliza a las Unidades de Manejo Ambiental.
Profepa programa inspección en parque regional
En relación con la denuncia sobre maltrato animal en el parque regional Griselda Álvarez, en la capital del estado, Hurtado Ramos adelantó que se realizará una inspección a las instalaciones para conocer la condición física de las especies salvajes que se encuentran en ese lugar.
“Nosotros tenemos programada una inspección al parque regional. No se llevó a cabo esta semana por cuestiones de trabajo y programación, pero está programa y se realzará, y si identificamos que están (los animales) en condiciones precarias, se reubicarán”.
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