El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, rechazó ayer la posibilidad de presentar su dimisión como pide la oposición conocerse que Ruby, la joven marroquí que acudió a ocho de sus fiestas cuando era menor de edad, pidió 6.6 millones de dólares al mandatario por “negarlo todo” cuando estalló el escándalo.
Ayer, a su llegada a la Cámara de los Diputados, el primer ministro fue preguntado por los periodistas sobre si tenía intención de dimitir ante el gran escándalo político que vive Italia.
“¿Dimitir?, ¿pero están locos?”, contestó y aseguró que está divirtiéndose y que se encuentra “sereno”.
El líder del principal partido de la oposición, el Partido Demócrata (PD), Pierluigi Bersani, pidió a Berlusconi que se “retire a los quehaceres de su vida privada”. El ex magistrado Antonio Di Pietro, líder del también opositor Italia de los Valores (IDV) dijo que “Berlusconi debería irse, no sólo por lo que ha hecho en la vida privada, sino también por lo que no ha hecho en la vida pública”.
Más “turbación”. Ayer, tras reunirse con Berlusconi, el presidente de la República, Giorgio Napolitano, no quiso comentar si había hablado del escándalo con el primer ministro, aunque pidió que se aclare en los tribunales todo el asunto ante la “turbación” que acusa el país por los continuos detalles que van haciéndose públicos sobre la investigación.
Por su parte, el diario de los obispos italianos, “Avvenire”, pidió ayer que se clarifique rápidamente la situación, ya que se trata, subraya, de una historia “tremenda y que ofende”.
Extractos del sumario contra el premier
“Papi es nuestra fuente de dinero”
Las llamadas intervenidas por la Fiscalía de Milán revelan, según recoge El Mundo en su edición digital, la lucha descarnada que se establecía entre las chicas que asistían a las fiestas a fin de conseguir ser elegidas para pasar la noche con Berlusconi, de 74 años, lo que suponía mayores ganancias.
“Papi es nuestra fuente de dinero”, le recuerda una de ellas a otra que se queja de estar “hasta la madre de este viejo”.
El ritual consiste en estar dispuesta a bailar para Berlusconi disfrazada de enfermera o de agente de policía, a hacer un “striptease” en un tubo, a dejarse sobar por Il Cavaliere junto a las demás chicas y a lograr hacerse un hueco el grupo final que pasará la noche en compañía del primer ministro.
Nicole Minetti, la ex bailarina de televisión reconvertida por Berlusconi en consejera de la región de Lombardía y sospechosa de dirigir en harén del primer ministro, alerta a una amiga de que no es fácil.
“Júrame que no te lo vas a tomar mal. Te darás cuenta de que hay gente para la que supone la ocasión de su vida, por lo que verás cosas increíbles. Fíate de mí y concéntrate en hacerle un francés [sexo oral] porque a él le vuelve loco”.
Pero el delito que podría llevar a Berlusconi a la cárcel es haber mantenido relaciones sexuales con una menor a sabiendas de que lo era a cambio de dinero. Se trata de la marroquí Ruby, que entre marzo y mayo del año pasado, cuando tenía 17 años, pasado acudió varias veces a Arcore, la villa de Berlusconi en Milán.
Para tratar de comprar su silencio, Berlusconi le habría ofrecido mucho dinero. “Silvio me llama continuamente, le cuenta a una amiga en una llamada intervenida: “Me ha llamado ayer y me ha dicho: Ruby, te doy todo el dinero que quieras, te pago. Te cubro entera de oro, pero lo importante es que escondas todo, que no digas nada a nadie”.
COn información de Crónica.
