UdeC trabaja para que, en diez años, Colima sea referente cultural en el país: Miguel Ángel Aguayo

“Espero que en la universidad, durante los próximos diez años, exista una pléyade de artistas, de músicos, de artistas visuales y de escritores, para hacer de colima un referente cultural en país y en eso estamos trabajando” fueron las palabras que expresó Miguel Ángel Aguayo López, rector de la Universidad de Colima, en la ceremonia de entrega del XXX Premio Narrativa Colima por Obra Publicada, que este año ganó Jaime Romero Robledo con su novela El mundo de ocho espacios.

En su intervención Aguayo López, además de felicitar al joven escritor, dijo que con la entrega de este galardón literario se pone de manifiesto que el talento existe y que lo único que hay que hacer es ponerlo al servicio de la sociedad. En este sentido, añadió que “las universidades son fábricas de oportunidades” y respecto a nuestra máxima casa de estudios, dijo que actualmente existen grandes talentos en el área musical, jóvenes a quienes se les ha impulsado y se encuentran cursando posgrados en diferentes partes del mundo.

Dijo también que la actividad cultural en Colima es relevante a nivel nacional y que se realiza un trabajo conjunto entre la UdeC y diversas instituciones para que nuestra entidad se posicione cada vez más como un referente dentro y fuera del país. En este contexto, destacó la pertinencia del Premio Narrativa Colima, que pone de manifiesto la importancia de la escritura en un país como el nuestro, que se ha vuelto tan complejo.

Sobre el trabajo que realiza la UdeC en el ámbito cultural, Aguayo López habló de la creación de un nuevo museo universitario con el nombre del escritor y artista visual Fernando del Paso, que será inaugurado en una vieja casona colimense, acondicionada para ofrecer un acervo de más de 2 mil obras donadas por el citado artista y que será además un espacio de exposición para los estudiantes de artes visuales de nuestra casa de estudios.

Por su parte, la directora del Instituto Nacional de Bellas Artes y Literatura (INBA), Teresa Vicencio Álvarez, al hablar sobre la obra reconocida con el premio Narrativa Colima, dijo que el jurado escogió El mundo de ocho espacios porque es una obra que “augura una notable expansión lingüística y narrativa que no se agota en este volumen”.

Resaltó que con este premio se hace el reconocimiento a Jaime Romero “por la creatividad, originalidad, innovación, constancia y disciplina que ha mostrado en su quehacer literario”. Además, reconoció al Estado y a la Universidad de Colima por el constante impulso que han dado a la literatura durante los 30 años del premio Narrativa Colima, junto con el INBA.

El premio Narrativa Colima, señaló, fue creado en 1980 y desde entonces ha significado un importante estímulo a la creación escrita y por tanto una impulso a la literatura mexicana. Durante estos 30 años se han reconocido obras literarias como las de Sergio Pitol, Mónica Lavín, Daniel Sada, Carlos Montemayor, Juan García Ponce, Beatriz Espejo, entre otros autores.

Por su parte, el escritor colimense Alberto Llanes habló del contacto que desde que era estudiante de Letras de nuestra máxima casa de estudios ha podido tener con diversas personalidades del mundo literario que obtuvieron en algún momento dicho galardón, entre ellos Mónica Lavín, Enrique Serna, René Avilés Fabila, Pablo Soler Frost, Paco Ignacio Taibo II, Guillermo Fadanelli, José Agustín y Hernán Lara Zavala. De igual manera, destacó que a partir de esa noche Jaime Romero formará parte del salón de la fama del Premio Narrativa Colima.

 

Finalmente, Llanes aseguró que la novela premiada resulta “una obra con un alto contenido de metafísica y elementos matemáticos y de neurolingüística, que representa un interesante reto para el lector; es una novela atrevida, brillante, que encierra todos los gustos”.

Al tomar el uso de la voz, el autor de El mundo de los ocho espacios agradeció el cálido recibimiento que ha tenido desde su llegada a nuestra ciudad y aseguró que significa para él todo un honor compartir un lugar junto a otros grandes escritores que han obtenido el Premio Narrativa Colima y que representa además, la cima de su carrera.

Con visible emoción, Romero Robledo dijo, al hablar sobre la elaboración de su obra, que la novela fue terminada en el 2003, a la edad de 29 años, pero fue hasta el 2009 que pudo ser publicada. Sobre el proceso de creación añadió: “fue un proceso de escritura muy arduo, de cuatro años, a través de una fuerza inconsciente que estaba proyectando un laberinto interior hacia afuera”.

Dijo, en este sentido, que su intención era crear un mundo y una mitología donde un demiurgo pusiera a sus personajes en un juego en el que están destinados a batallar; “me gusta mucho que la literatura pueda captar no solamente los planes del autor, sino todo lo que está en las corrientes subterráneas de la sociedad y del propio escritor”.

El joven galardonado dijo también que su obra se constituye como un laberinto de la razón, en donde existe una constante búsqueda para conectarse con la parte del corazón, ya que uno de sus intereses como artista es usar a la narrativa para colocar puntos de vista filosóficos.

Finalmente, dijo que la novela debe ser de particular interés para los universitarios, que podrían sentirse identificados con los personajes y habló de un reto que existe actualmente para todas las juventudes, de vivir en el mundo de manera que el amor no esté ausente; “creo que éste es un libro donde se pone de manifiesto que muchas veces las palabras han perdido su sentido, por lo que me gustaría que los universitarios rescaten el corazón de las palabras y no seguirlas vendiendo por muy poco, esto es clave”.

 

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí