Estado de México.- Derramaron lágrimas de sangre sobre el césped del estadio Nemesio Díez, único desahogo que encontraron. Toluca perdió este domingo 1-2 contra América, pero el marcador global terminó 3-2 con ventaja para los ‘Diablos’.
Las Águilas llegaron al «infierno» mexiquense en agonía futbolística, pero se marcharon con la amargura que provoca haber asustado al diablo, mas no exorcizarlo.
Dolorosa eliminación del América en el Apertura 2012, con la frustración de quedarse a un gol de echar al líder de la competencia.
La sequía, que ya es de siete años y medio, se alargará otros seis meses, por lo menos. Aquella anotación de Édgar Benítez, en las postrimerías del juego de ida, resultó catastrófica para los amarillos.
La de este domingo en ‘La Bombonera’ (60′) sólo fue anecdótica. Por más que los 20 mil seguidores escarlatas, presentes en el inmueble, estallaron de júbilo, la misión americanista no se modificó. Necesitaban tres tantos. Para entonces ya habían conseguido dos.
Miguel Layún (16′) y Daniel Montenegro (37′) los firmaron. Ambos, celebrados con una importante descarga emocional.
El más criticado de los futbolistas dirigidos por Miguel Herrera inició la sublevación en el averno. Definió con la convicción que faltó a varios de sus compañeros durante los primeros 90 minutos. El ‘Rolfi’, ese capitán tan cuestionado, reactivó las ilusiones.
El Toluca las fulminó con su futbol acompasado, frío y calculador. La anotación marcada por Benítez sirvió como inyección anímica, aunque el peligro rondó la portería defendida por Alfredo Talavera hasta el silbatazo final de Roberto García.
Ya nada modificó el 1-2 (3-2 global para los Diablos Rojos), lo que explicó las sentidas lágrimas azulcremas.
Fueron capaces de asustar al mismísimo demonio en el averno, pero no pudieron exorcizarlo. De nada valió terminar el campeonato invictos como visitantes (seis victorias y cinco empates).
El Toluca tendrá el honor de cerrar en casa la final… Y buscar su undécima estrella.
Con información de El Universal
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