La Organización Mundial de la Salud (OMS) reportó 12 millones 964 mil 809 casos y 570 mil 288 muertes por COVID-19, lo que podría implicar que mañana miércoles se contabilicen 13 millones de casos.
De ser así, de nuevo habrían pasado cinco días para que el mundo acumulara un nuevo millón de casos, impulsados principalmente por la región de América, quien acumula 6 millones 780 mil 428 casos y 288 mil 430 muertes al corte de hoy.
Este martes, México desplazó a Italia en número de muertes al contabilizar 35 mil 6 fallecimientos. Le anteceden Estados Unidos en primer lugar con 134 mil 704, Brasil en segundo con 72 mil 100 y Reino Unido con 44 mil 830.
En quinto sitio de muertes se ubica Italia con 34 mil 967, sexto Francia 29 mil 925, séptimo España 28 mil 406, octavo India 23 mil 727, noveno Irán 13 mil 32 y décimo Perú 11 mil 870.
Por número de casos acumulados, Estados Unidos suma 3 millones 286 mil 63, Brasil un millón 864 mil 681, India 906 mil 752, Rusia 739 mil 947, Perú 326 mil 326, Chile 317 mil 657, México 299 mil 750, Reino Unido 290 mil 137, Sudáfrica 287 mil 796 e Irán 259 mil 652.
COVID provocará un gran movimiento migratorio en Centroamérica
El deterioro de las economías en Centroamérica está provocando más violencia y falta de servicios básicos y generará grandes movimientos migratorios una vez que los países reabran sus fronteras.
La agencia de la ONU para los Refugiados (ACNUR) alertó que el cierre de las fronteras deja a la gente con menos opciones de protección ante la violencia y la pobreza.
Un informe de la oficina de coordinación humanitaria asegura que en El Salvador más personas están muriendo en casa por COVID-19 y otras causas sin recibir ayuda médica porque los servicios de atención primaria están suspendidos.
Según las cifras de las ONG que recoge el informe las muertes por problemas metabólicos, respiratorios y de corazón se han multiplicado por cuatro comparado con la primera mitad de 2019.
En Guatemala, las ONG indican que las personas que necesitan ayuda para comer en el Corredor Seco han aumentado un 103 por ciento respecto a 2019. La inseguridad alimentaria grave ha crecido casi un 300 por ciento.
Se estima que más de un millón de personas necesita ayuda alimentaria en esa zona.
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