La revuelta popular que derrocó al régimen del ex presidente de Túnez, Zine Al Abidine Ben Ali, provocó 219 personas muertas y 510 heridas, de acuerdo con el delegado del Alto Comisionado de las Naciones Unidas en el país norafricano, Fraj Fennichi.
Un total de «147 personas fueron asesinadas en las protestas», y otras 72 murieron en las revueltas ocurridas en distintas prisiones, detalló.
Naciones Unidas envió a un grupo de expertos en derechos humanos para evaluar la situación en la pequeña nación norafricana.
Las protestas por la pobreza, el desempleo, la corrupción y la represión en Túnez iniciaron a mediados de diciembre del 2001. El 14 de enero, Ben Ali se refugió en Arabia Saudita.
Tras la huída de Ben Ali, quien gobernó el país durante 23 años, las protestas continuaron para exigir que ninguno de sus colaboradores permaneciera en el gobierno.
El gobierno interino de Túnez emitió una orden de arresto internacional en contra de Bel Ali. Europa bloqueó lo bienes del ex presidente y de su esposa, Leila Trabelsi.
La de Túnez es la primera revuelta popular en generaciones que consigue derribar a un líder árabe y ha conmocionado a toda la región.
Con información de CNN.
