Villa de Álvarez.- De nueve comerciantes que se habían establecido en las instalaciones de la Feria de Villa de Álvarez solo han quedado cinco, debido a las bajas ventas que han tenido durante la edición 2021 de los Festejos Charrotaurinos, una festividad que se volvió atípica debido a la pandemia del COVID-19.
Al inicio de esta edición, el Patronato de los Festejos Charrotaurinos de Villa de Álvarez dio a conocer que aunque no iba haber feria, sí se instalarían algunos puestos y los asistentes deberían ingresar en su automóvil y con cubrebocas.
Inicialmente se había colocado un vendedor de cobijas, otro de fresas, uno más de lentes y el de gorditas de natas, los cuales ya se retiraron al no tener ventas redituables.
Solo se quedó la encargada de los baños, que también vende algunas cosas; un puesto de venta de nueces, otro de bolsas de plástico tejidas, el de Tortas El Peregrino y una vendimia de quesadillas y huaraches.
“Cuando está el árbol dando sombra todo mundo se acerca y cuando no da sombra todo mundo se aleja”, señaló una comerciante.
Los que aun están, se notan desanimados, algunos tienen más de 25 años trabajando en La Petatera.
Señalan que en días normales de la Feria, antes de la pandemia, los lunes son de ventas bajas, los martes suben por las corridas formales que había, mientras que los miércoles y jueves se reducían de nuevo, pero los fines de semana eran los días de buenas ganancias, sin embargo la situación se ha complicado ahora con la suspensión de las festividades debido al COVID-19.
Con un horario de las 11:00 a las 23:00 horas los comerciantes que aún quedan en las instalaciones de la Feria de ‘La Villa’ permanecerán, hasta el domingo 28 de febrero y otros hasta el lunes 1 de marzo.
Ahí se pueden comprar nueces, camote cubierto, chilacayote, gomitas, entre otros productos de este tipo en precios desde 20 y 30 pesos los paquetes.
Las bolsas tejidas se venden desde 25 pesos la más pequeña y 60 pesos la más grande.
En las tortas El Peregrino se oferta la sencilla en 45 pesos y la combinada en 55 pesos.
En otro puesto se ofrecen quesadillas y huaraches de maíz azul con carne asada, champiñones, huitlacoche, chicharrón prensado, tinga de pollo y deshebrada de res.
La quesadilla con un guisado o combinada cuesta 35 pesos y los huaraches a 70 pesos.
Derechos Reservados AF
