LA INSOPORTABLE LEVEDAD DEL SER

¿QUÉ VIENE?

Por: SEAN OSMIN HAMUD RUIZ

Qué difícil debe ser tener que escucharse a uno mismo intentando justificar o minimizar hechos reales con imaginaciones particulares.

Ver evidenciadas acciones concretas, con nombres, fechas, datos, documentos, etcétera e intentar doblar ello emulando la curvatura del universo ante un hoyo negro, dejando de lado dichos, convicciones y promesas, ha de ser de lo más complicado para cualquiera.

Me cuesta trabajo imaginar el trance emocional que se genera en la conciencia cuando ante lo que sucede, debes convencer a la conciencia de que es un truco, una mentira.

Negar el calor cuando estas todo sudado. Y además ponerte un abrigo para que los demás puedan observar tu convencimiento del dicho. Algo sin duda sumamente incómodo.

Seguro que más de una noche, es una psicodélica pesadilla, te persiguen fotos, contratos, cantidades y mil imágenes que, como en la famosa escena de la película de Disney, El Aprendiz de Brujo, atacan sin misericordia hasta casi hacerte perder la razón.

Pobre presidente. Casas grises, sobres amarillos, amistades de sus hijos y hasta asientos de primera clase en avión, llevándolo a una vorágine. Y en el enorme amor por los suyos, simplemente alegar, machaconamente, que él tiene otros datos. Triste estampa de esa, LA INSOPORTABLE LEVEDAD DEL SER.

MICROCUENTO

Como las matrioskas, las cebollas, el reflejo del espejo en el espejo o los infinitos agujeros de gusano teóricos del universo, capa a capa de todo mi ser se afecta con estos malditos 40 grados.