Colima.- Las lluvias que caen en la zona norte del estado están quitando de los pastos la ceniza volcánica que los cubrió en los últimos días, y hasta el momento las autoridades no han recibido ningún reporte de ganado que resulte afectado por la ingesta de este material que puede ser nocivo para su salud, informó el secretario de Desarrollo Rural, Adalberto Zamarroni Cisneros.
En rueda de prensa conjunta con el delegado de Sagarpa, Carlos Salazar Preciado, y el presidente de la Unión Ganadera Regional de Colima, Jorge Salazar Barragán, el funcionario aseguró que los pastos que recibieron la ceniza volcánica hasta el momento no son un riesgo.
El funcionario estatal admitió que la exposición y el consumo prolongado y en grandes cantidades de este material pueden causar daño intestinal en los animales, algo que podría ocurrir si el volcán expulsara más ceniza.
Zamarroni Cisneros también apuntó que la Comisión Nacional del Agua elabora un estudio de calidad del agua en las fuentes de abastecimiento cercanas al volcán según el cual el líquido que consumen los animales cumple con la norma mexicana respectiva, por lo que no representa ningún riesgo para su salud.
Además, Zamarroni Cisneros dio a conocer medidas de prevención para cuidar la salud del ganado en las zonas más cercanas al volcán:
- Atender recomendaciones de PC.
- Cubrir los depósitos donde abreva el ganado.
- Cubrir silos y almacenamiento de pasturas y forrajes para que no se contaminen. Evitar pastoreos directos.
- En caso de ser necesario, movilizar ganado a zonas de menor riesgo mientras pasa la contingencia.
- Reportar cualquier anomalía a Sagarpa, a Seder o a las uniones ganaderas.
Las autoridades estiman que en la zona del volcán hay entre mil 200 y mil 500 cabezas de ganado.
Cultivos, ilesos
El delegado de Sagarpa, Carlos Salazar Preciado, destacó que no hay ningún cultivo que resulte dañado por la caída de ceniza, puesto que ya pasó la época de cultivo de zarzamoras y arándanos, de tal modo que las plantas, al estar en la época de poda, no sufren ninguna afectación.
Además, destacó que las lluvias que ya caen en la zona más afectada, así como la topografía de la región volcánica, se llevan la ceniza a las barrancas, donde no provoca daños.
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