Una investigación desarrollada por el el neurólogo y psiquiatra estadounidense Alan Hirsch dio como resultado que a las mujeres les excitan determinadas fragancias, aunque ellas no están vinculadas directamente con el sexo. Es así que este estudio encontró que a ellas las activa eróticamente el olor de los caramelos, el de los pepinillos y hasta el talco que se usa para los bebés.
Un estudio revela que ellas se excitan con el olor a caramelo, pepinillos o talco de bebé
Para llevar a cabo este análisis, el llamado Dr. Smell, olor en inglés, fue midiendo el flujo vaginal de varias mujeres mientras se les pedía que olieran distintos aromas. Los tres mencionados antes provocaron que su flujo íntimo se incrementara hasta en un 13 por ciento, en comparación con los demás.
Por el contrario, cuando olían carnes, perfumes de hombre o la fragancia propia de las cerezas, su nivel de excitación no sufría el mismo cambio ascendente. Está comprobado que el sentido del olfato juega un papel primordial en la sexualidad de ellos y de ellas, porque pueden aumentar el deseo sexual, relajando a las personas que entran en contacto con sus olores preferidos.
