La falta de comunicación entre médico y paciente ha originado que se presenten diversas quejas ante la Comisión Estatal de Arbitraje Médico, aseguró su presidente José Rivas Guzmán, señalando que por el momento no se han presentado casos graves.
“El común denominador está en la relación médico-paciente, en la comunicación, creo que nuestra insistencia cuando vamos a hablar a hospitales, colegios de médicos, insistimos en dos factores que son sustantivos, por un lado el expediente clínico y por el otro, el consentimiento válidamente informado”, añadió en entrevista.
Informó que hasta el momento, “no hay nada grave y si hubiera alguna situación problemática, seria, grave, entonces si estamos obligados a dar cuenta a la autoridad ministerial dado el caso”.
Dijo que cuando se llega a algún acuerdo entre médico y paciente, “no termina ahí el asunto, concluye cuando la comisión le hace saber a la autoridad o al directivo las medidas preventivas o correctivas que va a aplicar para evitar incidencias o reincidencias”.
Mencionó que el trabajo de la Comisión que preside va bien, “en 2010 tuvimos más de 2 mil acciones de información, de orientación, de gestión inmediata, de atención de quejas, llegamos a fin de año con 24 quejas atendidas”.
“Este año llevamos 2 quejas, está otra más en proceso”, agregando que no cree que la productividad se mida en función del número de quejas, “sino en función de la calidad de la atención que se ofrezca para tratar de lograr la mediación y la conciliación, ahora lo hemos logrado muy satisfactoriamente en esta forma, tanto para los médicos como para los quejosos”.
Informó que en esas 24 quejas se ha llegado a la conciliación y se han resuelto satisfactoriamente, “cuando en alguna de ellas no hubo el convenio, la conciliación, quedan a salvo los derechos del quejosos para acudir a la vía que mejor le convenga incluyendo la ministerial”.
“El expediente es una responsabilidad del equipo de salud, una responsabilidad institucional, profesional, pero la comunicación médico-paciente es obligación de todos, y entonces deben informarle detalladamente a la persona que se trata su problema, qué se le va hacer, cuál es el tratamiento, cuáles son los posibles beneficios, cuáles son los posibles riesgos que va afrontar”, añadió.
Dejó en claro que la medicina no es exacta, “puede haber riesgo inherentes, de tal suerte que la persona está en el derecho de consultar una segunda opinión y dar su consentimiento, finalmente no se hace así y viene el problema por una falla en la comunicación”.
Mencionó que la seguridad social y la secretaría de salud encabezan la lista en cuanto al número de quejas, “en 2010 hubo más quejas para la Secretaría de Saludad y de todo esto está enterado el Consejo que es nuestra máxima autoridad en la comisión en la que participan el colegio de médicos, la federación de colegios y barra de abogados, la federación de egresados de la Universidad de Colima, el Centro Universitario de Investigaciones Biomédicas, es un Consejo muy sólidamente estructurado, están informados, participan y se toman decisiones muy colegiadas”.
En este año, dijo que las quejas son contra la Secretaría de Salud y el Seguro Social, “tenemos la gran situación de estar insistiendo en la buena comunicación médico-paciente, ahí empieza el problema”.
Derechos Reservados AFMEDIOS
