El gobierno helvético aplicará la iniciativa -aprobada este domingo en referéndum- de expulsar automáticamente a los extranjeros que hayan cometido delitos graves, pero aplicando el derecho internacional y la Constitución.
Así lo afirmó la ministra de Justicia, Simonetta Sommaruga, tras conocer que la iniciativa propuesta por el ultranacionalista y xenófobo UDC fue aprobada con el 52.9% de los votos emitidos.
Para ello, la ministra quiere que los proponentes de la iniciativa trabajen estrechamente con su equipo para analizar cómo conjugar ambos deseos, algo que parece ardua tarea, dado que la expulsión automática, sin estudio caso a caso, es contraria a la amplia jurisprudencia establecida por el Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
La duda es si este «entendimiento» se parecerá al contra-proyecto creado por el Consejo Federal (gobierno) para intentar encauzar la expulsión de extranjeros en el marco de la Constitución Helvética, la Ley Humanitaria Internacional y los acuerdos de Libre Circulación con la Unión Europea, y que este domingo fue rechazado con el 54.2 de los votos.
Sommaruga asumió que el resultado de este domingo es «la expresión de inquietudes y miedos de la población que hay que tomar en serio», aunque señaló que no se debe perder de vista la importancia de la integración.
«La gran mayoría de los extranjeros que viven en Suiza no son criminales y están bien integrados», recordó la ministra.
Con información de EFE.