Especialista afirma que deportistas de élite perderán sus capacidades durante la cuarentena

La expansión del coronavirus ha ocasionado la cancelación de todo tipo de eventos de concurrencia pública, como los Juegos Olímpicos Tokio 2020. Realizar la competencia en medio de una crisis que ha generado el cierre de lugares de entrenamiento y de todos los instrumentos para los deportistas en muchos países suponía una gran desventaja unos respecto de otros.

Ahora bien, la cuarentena ha paralizado todas las actividades deportivas, por lo cual los atletas profesionales estarían experimentando pérdidas en sus capacidades físicas. Así lo sostiene María del Pilar Martín Escudero, investigadora del Departamento de Radiología, Rehabilitación y Fisioterapia y de la Escuela de Especialización Profesional de Medicina de la Educación Física y el Deporte de la Universidad Complutense de Madrid.

En una entrevista difundida por la institución, la investigadora sostiene que la postergación de los JJ.OO. ha sido la decisión correcta, pues la salud de los atletas es lo primordial. No obstante, advirtió que este periodo de paro supone una pérdida en sus capacidades como competidores profesionales.

“En esta época de confinamiento se produce un desentrenamiento de todas las capacidades físicas de los deportistas que provoca por lo tanto una pérdida de masa muscular y por ende una disminución de la fuerza, de la potencia y del equilibrio”, remarcó Martín Escudero.

 

Asimismo, sostuvo que los deportistas perderán otras capacidades, como resistencia aeróbica, anaeróbica, fuerza, flexibilidad y velocidad. La especialista citó que diversos estudios han demostrado que, tras 5 semanas sin entrenamiento, empieza a producirse el aumento de la masa grasa, un aumento del perímetro de la cintura y una disminución de la tasa metabólica.

Otra de las consecuencias del desentrenamiento es una alteración en la estructura ósea. Para la investigadora, ello se debe a la disminución en la densidad ósea y la mineralización producidas por la falta de ejercicio y de las horas de exposición solar. Por ello, la masa muscular disminuye y se produce la modificación de la distribución de ciertas fibras musculares.

Martín Escudero precisó que el riesgo de lesión aumentará cuando los deportistas vuelvan a los entrenamientos, por lo que es necesario que realicen entre 2 y 3 semanas de reacondicionamiento del cuerpo. Igualmente, recomendó a los deportistas amateur a incorporarse a los entrenamientos de forma gradual.

Por otro lado, la suplementación también es necesaria en deportistas de alta competencia. La Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA) y Agencia de Medicamentos y Alimentación (FDA) han coincidido en que “un alimento es considerado legalmente fuente de proteínas si las proteínas aportan como mínimo el 12 % del valor energético del alimento”.

Este el caso de los pescados, las carnes o las legumbres, pero también de productos proteicos como la proteína de suero de leche, más conocida en el mercado como proteína whey. Esto se debe a que la proteína whey está asociada a la reparación del tejido celular y a la recuperación más rápida de la fatiga muscular tras el ejercicio, necesidades que un deportista de alto nivel requiere.  

En cuanto a la dosis, tanto la OMS como la Autoridad Europea de Seguridad Alimentaria (EFSA)  han establecido una Ingesta Diaria Recomendada (IDR) para adultos de 0,83 g proteína/kg peso corporal/día. Si una persona pesa 70 kg, deberá consumir unos 8 g de proteína diariamente.