La nanotecnología es el estudio y desarrollo de sistemas en escala nanométrica. Se basa en la manipulación de materia en tamaños que abarcan entre uno y 100 nanómetros. Asimismo, comprende una amplia gama de procesos de fabricación y tecnologías para crear proyectos o mejorar ya existentes.
Esta ciencia se utiliza en campos como la medicina, energía, medio ambiente, la informática y, hasta hace unos años, en la cosmética.
Una de las ventajas de su aplicación en procedimientos capilares, es que permite una penetración profunda de los ingredientes en la hebra, logrando un mejor resultado.
Además, se ha comprobado que el cabello absorbe con mayor facilidad y rapidez las moléculas diminutas, lo cual reduce el tiempo de aplicación del tratamiento.
Gracias a estas dos ventajas, se regenera el córtex del cabello, tanto en su parte intermedia como en la cutícula y la médula. De esta forma, repone la masa capilar y equilibra las cargas estáticas. Se utiliza principalmente en tratamientos de hidratación y nutrición
Aunque en el mercado encontramos una infinidad de productos para alcanzar una melena hidratada, desde cremas reparadoras a sérums para el cabello fabricados con aceite de Argán; el sector belleza ha tomado ventajas del desarrollo tecnológico y ha creado procedimientos capilares más complejos como la nanokeratina.
La nanokeratina es un tratamiento capilar que favorece la penetración de la keratina dentro de la hebra. Además, también trata problemas en el cuero cabelludo o cualquier dificultad capilar de una forma profunda y rápida.
También existe un tratamiento denominado el nanocapilar para alopecia. Expertos afirman que esta técnica regenera el colágeno en la piel cabelluda e incrementa su permeabilidad. Así, facilita la penetración de sustancias activas. Estos tres beneficios estimulan el crecimiento del cabello.
El nanocapilar es un método físico-mecánico, no produce dolor, no requiere de anestesia, tiempo de recuperación ni produce efectos secundarios. Utiliza tecnología láser de baja frecuencia, diodos infrarrojos de última generación y nanoesferas.
Las nanoesferas son partículas enriquecidas con niveles de queratina, vitamina B y lecitina de soja con proteínas encapsuladas. El procedimiento se basa en exponer los folículas a una determinada longitud de onda para aumentar la microcirculación sanguínea del cuero cabelludo, de esta forma, mejorar la calidad de células capilares.
La nanotecnología también es utilizada para la fabricación de productos capilares. Investigadores de la Universidad de Ohio (Estados Unidos), utilizaron nanometría y microelectrónica para examinar al máximo detalle una amplia gama de diferentes tipos de cabello.
Estudiaron la superficie del pelo y el interior de la columna capilar, con el objetivo de testear un nuevo acondicionador de alta tecnología. Comprobaron que la diferencia entre un cabello saludable y uno dañado se encuentra en los bordes de la cutícula. Un cabello sano cuenta con bordes de la cutícula parejos contra la columna capilar y un cabello dañado presenta estos bordes despegados del eje.
De esta forma, mediante un estudio nanométrica, develaron que los acondicionadores capilares no suelen nutrir de forma equitativa la columna capilar.
