Jalisco.- Todos los menores de edad tienen derecho a la integridad física y psicológica, así como a la protección contra todas las formas de violencia, ya que estas pueden originar un daño real o potencial para la salud del niño, su supervivencia, desarrollo o dignidad en el contexto de una relación de responsabilidad, confianza o poder.

El maltrato infantil es un atentado a los derechos más básicos de los niños, niñas y adolescentes, consagrados a partir de la Declaración Universal de los Derechos Humanos. Atentados que se definen como la acción, omisión o trato negligente, no accidental, que priva al niño de sus derechos y bienestar, que amenaza y/o interfiere su ordenado desarrollo físico, psíquico y social.

La Secretaría de Salud Jalisco (SSJ) y el OPD Servicios de Salud Jalisco reconocen la necesidad de desmitificar las idealizaciones que “aceptan” y “disfrazan” el maltrato como forma “educacional” y “correctiva” de los niños y niñas.

Es por ello, que una de las acciones que se llevan a cabo en contra del maltrato infantil, es el proporcionar al personal de salud las herramientas para la detección y clasificación del maltrato infantil, así como las líneas de acción en casos de sospecha. Además, se busca sensibilizar al personal sobre la importancia de la promoción hacia la prevención del maltrato infantil en el ámbito familiar.

A nivel mundial, más del 50 por ciento de los adultos, mujeres y hombres, piensan que es normal usar el maltrato contra los menores de edad como forma de educación y castigo, 75 por ciento de los niños han sufrido algún tipo de disciplina que involucra violencia de acuerdo a la UNICEF.

México ocupa los primeros tres lugares de maltrato y violencia infantil a nivel mundial, así como el sexto lugar en homicidios en menores de edad en América Latina, según los resultados del Módulo de Trabajo Infantil (MTI 2013).

Decálogo de recomendaciones para madres, padres y/o tutores de menores de edad

  1. Mostrar el cariño entre todos los integrantes de la familia.
  2. Hablar de gustos y preocupaciones con confianza.
  3. Encontrar juntos la solución a problemas.
  4. Celebrar los triunfos y reconocer el esfuerzo de los involucrados.
  5. Dedicar tiempo para convivir con todos los integrantes de la familia.
  6. Tener en cuenta que la familia es un equipo en donde todos y todas están involucrados.
  7. Los castigos físicos, las amenazas y los gritos deben evitarse siempre.
  8. Fomentar la expresión de sentimientos y reflexiones.
  9. Trasmitir y enseñar las virtudes, en donde se muestre el respeto, la tolerancia y la generosidad.
  10. Ante la rabieta de tu niño o niña, se recomienda esperar a que se calme y hablar con él para darle alternativas a lo que te pide.Si te lo permite abrázalo, esto le generará confianza y seguridad.