Colima.- El sacerdote católico, Mauricio Antonio Víquez Lizano, acusado de pederastia en Costa Rica ingresó a México desde enero donde se ocultó huyendo de la justicia de su país, y ayer domingo 18 de agosto fue detenido en San Nicolás de los Garza, Nuevo León.
De acuerdo a fuentes consultadas por AFmedios, las víctimas Michael Rodríguez y Antony Venegas, tenían sospechas de que se habría refugiado en México a pesar de contar con una ficha roja emitida por Interpol y la justicia de Costa Rica.
Por ello buscaron la ayuda de la fundación FIND en México.
Rodríguez y Venegas tenían una misión casi imposible, localizarlo y lograr que las autoridades mexicanas lo detuvieran antes de que el delito prescribiera en su país.
De acuerdo las víctimas y Funcación FIND, el rastro de Víquez en México señalaba a los estados de Jalisco, Colima y Puebla.
Desde el lunes 12 de agosto, se comenzó una búsqueda en viviendas pertenecientes a la Iglesia Católica en Guadalajara.
El jueves 15 de agosto AFmedios tuvo conocimiento de la búsqueda que las víctimas y Fundación FIND pensaban realizar en el estado de Colima, pero la pesquisas de las autoridades finalmente concluyeron con la detención en el norte del país.
Juan Manuel Estrada, titular de FIND, dijo a AFmedios que la detención en el norte del país probablemente obedecía a su intención de huir a los Estados Unidos, luego de que comenzara a circular la versión de su localización.
Estrada expresó que la labor de búsqueda, tanto de las víctimas, autoridades y FIND fueron relevantes para que finalmente ayer domingo culminaron con la detención con posibilidades de extradición.
«Mauricio Víquez, el cura pedófilo de Costa Rica que la tierra ‘se tragó’ ya fue localizado y detenido, la Fundación FIND felicita a la Policía Federal por la detención del cura pedófilo, en próximas horas será trasladado a Costa Rica donde pagara en la cárcel sus delitos», dijo Estrada.
La detención del ex sacerdote costarricense en Nuevo León se ejecutó por la orden de captura internacional que tenía en su contra por presuntamente haber abusado de varios menores de edad, confirmaron fuentes de la Fiscalía General de República (FGR).
«Una detención que no termina con el traslado de Mauricio Víquez a Costa Rica, no podemos dejar pasar por alto el encubrimiento en México de sacerdotes que lo apoyaron y ayudaron a escapar».
Estrada comentó que la Fundación FIND apunta a miembros del clero en México por encubrimiento.
“Alguien lo encubrió, alguien lo protegió y alguien lo entregó”, dice.
En los próximos días presentarán ante la justicia mexicana una denuncia por encubrimiento contra miembros del clero mexicano, aseguró el activista jalisciense.
“Él seguramente llegó a México con amigos de la curia, que fue la que lo mantuvo escondido”.
El caso de Víquez por si mismo ya supone un hito en la justicia costarricense en cuando al tratamiento de la justicia de ese país para los delitos de índole sexual cometidos por miembros del clero y que Víquez fue portavoz de la Iglesia Católica en temas de familia incluso después de que las víctimas lo habían denunciado ante la Arquidiócesis de San José.
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Juan Manuel Estrada de la Fundación FIND habla sobre el caso y detención de Víquez Lizano.
