Colima.- Antonio vive en el Fraccionamiento Diamantes, al norte de la ciudad de Colima, y a pesar de que muchas familias viven ahí, ninguna ruta del servicio público brinda servicio para esa zona, camina todos los días hasta el Hospital Universitario para tomar un camión y poder trasladarse a su trabajo.
Este es el caso de muchos colimenses más, que víctimas del crecimiento de la zona conurbada de Colima-Villa de Álvarez, han quedado prácticamente fuera de las rutas establecidas para el transporte público.
Pero este no es el único problema, de las 230 unidades que atienden 25 rutas distintas, incluida la de Cardona y la Incluyente, muchas no se encuentran en condiciones óptimas, producto de la falta de mantenimiento, el descuido de los usuarios e incluso del vandalismo en ciertas colonias de la ciudad.
¿Y quién o quiénes son los responsables de estas deficiencias?
El líder del Sistema Integral del Transporte (Sintra), José Luis Carrasco Mesina, aseguró que aunque hay unidades de más de 10 años de antigüedad circulando, es inviable financieramente para los empresarios del transporte, renovar el parque vehicular.
“La Ley del Transporte dice que no deben circular unidades de más de diez años, pero no podemos cambiarla, que nos digan cómo”.
Para Carrasco Mesina, si se desea mejorar el sistema de transporte público se necesita la intervención de los tres órdenes de Gobierno para hacer un proyecto integral de mejora y sustitución de unidades, o eliminar el subsidio existente.
Iván Rojas García, encargado del sistema operativo de transporte, explicó que entre los subsidios a estudiantes, personas de la tercera edad, discapacitados y becas, pierden ganancias de más un millón de pesos cada mes.
“Que quede claro que no estamos en contra del subsidio, estamos conscientes de que es nuestro aporte social, pero debemos saber que es dinero que ponemos nosotros, y con lo del subsidio se podría estar renovando una unidad cada mes”.
Para los empresarios, otro de los problemas a los que se enfrentan es la inseguridad, pues cada vez es más común que sean víctimas de actos vandálicos y asaltos, 30 en lo que va del año, y priva la impunidad.
“Estamos en comunicación con Seguridad Pública, se han detectado a los delincuentes donde hemos llevado la fotografía y les hemos dicho donde viven y no los detienen, o cuando los detienen los sueltan”.
Los delitos suceden en colonias bien detectadas: Gustavo Vázquez, EL Mezcalito, La Reserva, EL Tívoli y Lomas Altas, por lo que incluso planean restringir los horarios de servicio y el ingreso de las colonias a esta zona.
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