Ciudad de México.- Tanto la Ciudad de México, como el Estado de México regresaron al color rojo en el semáforo de riesgo epidemiológico, por lo que se suspenderán las actividades no esenciales desde mañana sábado 19 de diciembre y hasta el próximo 10 de enero de 2021.

En un aviso conjunto, Hugo López Gatell Ramírez, subsecretario de Prevención y Promoción de la Salud del Gobierno Federal, informó las medidas que se aplicarán con la intención de disminuir la movilidad de las personas en esta la Zona Metropolitana del Valle de México que alberga a más de 23 millones de personas.

Destacó que la inercia que tiene la epidemia en esta región, requiere esfuerzos adicionales, por lo que tomaron la decisión de aplicar medidas extraordinarias, que disminuyan, durante las siguientes tres semanas los contagios, hospitalizaciones y muertes.

Por lo tanto quedarán suspendidas algunas actividades económicas que contribuyen a la movilidad y congregación de las personas.

Los sectores esenciales que sí quedarán en funcionamiento son: venta de alimentos, sin preparar y preparados, solo con servicio de entrega y no como servicio en local; energía, transporte, manufactura, salud, funerarios, construcción, financieros y telecomunicaciones.

También podrán continuar actividades la fabricación, comercialización y venta de medicamentos, talleres de reparaciones y refacciones, servicios de gobierno (tributario, seguridad, obra pública, agua y operativos).

Recordó que la epidemia de COVID-19 no ha terminado y apenas se empezarán a tener mecanismos de protección específica como vacunas, no obstante se deberán mantener las mediadas de protección básicas durante algunos meses: sana distancia, evitar salidas o reuniones, uso de cubrebocas, lavado de manos y la atención oportuna.

“Es muy importante tener claridad de que 2020 y 2021 serán años muy especiales para la historia de la humanidad, no es, por lo tanto, el momento para hacer fiestas, reuniones familiares, posadas y cualquier otro congregación que implica, necesariamente, el riesgo de contagios de COVID-19”.

Por su parte, Alfredo del Mazo Maz, gobernador del Estado de México, reconoció que durante las últimas semanas se ha observado un incremento en el número de contagios, defunciones y hospitalizaciones en el Valle de México.

Consideró “preocupante” el ritmo con el que incrementan los contagios pues ya se alcanzaron los niveles que se tuvieron en el pico más alto durante junio.

“Esto nos lleva a que tomemos medidas drásticas para frenar el ritmo de contagios. El estado de México pasa a semáforo rojo, esto significa suspender todas las actividades no esenciales.”

El gobernador aclaró que ésta fue una decisión difícil de tomar pues saben lo que implica la suspensión de la economía para muchas familias, pero destacó que se hizo priorizando la salud y el salvar vidas.

También informó que, además de las medidas restrictivas, se está fortaleciendo el sistema de salud y reconvirtiendo algunos espacios en hospitales para aumentar la capacidad de atención.

A su vez, Claudia Sheinbaum, jefa de Gobierno de la Ciudad de México, informó que se mantiene el trabajo coordinado con las autoridades sanitarias del Estado de México y se incrementará la capacidad hospitalaria en la capital.

“Necesitamos, necesariamente, disminuir la curva de contagios para que disminuyan las hospitalizaciones. Y por eso es que se toman estas medidas y pedimos un esfuerzo extraordinario a toda la ciudadanía.”

También dio a conocer que se trabaja con la Secretaría de Finanzas para analizar los apoyos que podrían otorgarse a la ciudadanía “en esta circunstancia compleja”.

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