Militante de las Juventudes Comunistas y presidenta de la Federación de Estudiantes de la Universidad de Chile, Camila Antonia Amaranta Vallejo Dowling es una figura central de la rebelión estudiantil que cambió la agenda de Chile en 2011 y que no dejó indiferente a nadie.
A sus 23 años, la bella joven es objeto de admiración por sus pares, quienes en las multitudinarias concentraciones vinculadas al paro de miles de estudiantes universitarios y de educación media luchaban por acercársele y obtener una fotografía junto a ella.
Vocera de la Confederación de Estudiantes de Chile (Confech), Vallejo asumió un inédito liderazgo juvenil y motivó a miles de estudiantes a salir a las calles a pedir el fin al lucro en la educación y demandar la gratuidad de la enseñanza superior.
En agosto de 2011, el 68 por ciento de los chilenos apoyaba el trabajo de la dirigente estudiantil, en tanto un 43 por ciento la citaba como «la chilena más admirada», superando incluso a la ex presidenta Michelle Bachelet (32 por ciento).
Vallejo, egresada de la carrera de Geografía, vivió en 2011 una especie de veneración popular colectiva, aunque también sintió el odio de varios personajes de la extrema derecha local que ven en ella a una reencarnación de la mítica líder comunista Gladys Marín.
El alcalde de la capitalina comuna de Providencia, el coronel en retiro del Ejército Cristián Labbé, calificó a la líder estudiantil como «una señorita que alega y que moviliza medio país porque tiene una cara así como endemoniada».
La reconocida dirigente juvenil pertenece a la llamada «cultura comunista». Sus padres, Reinaldo Vallejo y Mariela Dowling, militaron en el Partido Comunista en los 70, por lo que fue natural que a los 18 años ingresara a las Juventudes Comunistas.
Además, Vallejo cursó estudios en el Colegio Raimapu, proyecto educativo que postula buscar alumnos «cuestionadores» y que sean capaces de «desarrollar un pensamiento crítico», aspectos que justamente resaltan en la personalidad de la joven comunista.
El movimiento liderado por Vallejo a partir de mediados de 2011 superó las fronteras de la lucha estudiantil y se convirtió en un enjuiciamiento al modelo institucional y político, con una alta exposición pública.
Vallejo dijo a Notimex que «la crisis en el sistema educacional en Chile se debe a una crisis mayor, una crisis estructural de este modelo de desarrollo neoliberal, del tipo de Estado, del tipo de democracia que tenemos».
«Este movimiento no es sólo la expresión del mundo estudiantil, sino del mundo social. Para que se den los cambios en el sistema educacional hay que apuntar a cambios en el sistema económico y político», enfatiza la joven dirigente universitaria.
Sus partidarios, en tanto, aseguran que Vallejo «es mucho más que un rostro hermoso» e incluso indican que ella está consciente que el factor belleza está presente en la imagen que proyecta y en la apreciación que genera.
«Objetivamente, soy bonita y no tengo problema en decirlo, pero yo no decidí cuál iba a ser mi apariencia. Lo que sí decidí es cuál es mi proyecto político y mi trabajo con la gente», dijo Vallejo este año a la revista femenina chilena Paula.
Asegura que el hecho que los medios de comunicación resalten su belleza se trata de «una estrategia de disuasión de ellos» y agrega que «es común que (los medios) desvíen la atención de los temas de fondo planteando cuestiones superficiales como prioritarias».
El Tribunal de Ética del Consejo Metropolitano del Colegio de Periodistas acogió una denuncia contra el diario Las Últimas Noticias, que colocó una fotografía de la joven en portada con el titular «Camila Vallejo no quiso mover la colita».
Respecto al futuro de la joven dirigente comunista, ella reconoce que «siempre voy a estar metida en la política. Voy a continuar en las Juventudes Comunistas, después voy a pasar seguramente al partido, y en ese sentido tengo mi proyección política, claramente».
Además, espera titularse de geógrafa, para lo cual le falta la tesis que es «sobre la construcción social de territorios vulnerables», es decir, de la relación entre los efectos de las catástrofes naturales y los lugares más vulnerables socialmente.
Con información de Notimex
