El primer ministro italiano, Silvio Berlusconi, enfrenta una acusación por haber tenido relaciones sexuales con una adolescente.
La bailarina, identificada como Karima El Mahrough y apodada Ruby, tenía 17 años en el momento de la supuesta actividad, registrada entre febrero y mayo de 2010.
El fiscal de Milán dijo que Berlusconi es investigado por su complicidad en la prostitución y el abuso de poder.
La justicia de esa ciudad abrió el caso en diciembre pasado, después de que el primer ministro llamó a la policía y pidió la liberación de la adolescente, quien había sido arrestada en mayo por cargos de robo.
Los fiscales convocaron a Berlusconi para responder sus cuestionamientos.
También enviaron a la policía para revisar la casa de Nicole Minetti, miembro del partido del primer ministro y del consejo regional de Lombardía.
Supuestamente Berlusconi pidió a Minetti que fuera la tutora de Ruby, para que la adolescente pudiera salir de prisión.
Minetti también es investigada porque supuestamente favoreció y ayudó a la prostitución de menores, dijeron los fiscales. Actualmente la joven tiene 18 años y es considerada como un adulto.
El primer ministro siempre ha negado tener cualquier implicación con las prostitutas o de ofrecer fiestas salvajes en su casa.
La divulgación de la investigación surge un día después de que el Tribunal Constitucional de Italia anuló las partes fundamentales de una ley que protegía a Berlusconi del enjuiciamiento.
Esta fue diseñada para poner fin a un proceso penal contra los altos funcionarios del gobierno durante 18 meses, sobre la base de que están demasiado ocupados para comparecer ante el tribunal.
El máximo tribunal dictaminó que estos 18 meses son demasiado tiempo, y que son los jueces, y no los políticos, los que deben determinar si un acusado es libre de comparecer ante el tribunal.
La ley se modificará automáticamente para ajustarse a la sentencia que el Tribunal Constitucional publica en su veredicto.
El tribunal escuchó los argumentos este martes sobre la legalidad del derecho del «impedimento legítimo», que habría concedido a altos funcionarios del gobierno italiano a una situación equivalente a la inmunidad, mientras estaban en el cargo.
La ley de Berlusconi, apoyado por funcionarios de alto rango del gobierno italiano, señalaba que no podía ser procesado debido a que sus funciones oficiales hacían imposible su comparecencia para asistir a las audiencias del tribunal.
La ley fue aprobada en marzo de 2010, pero los fiscales de Milán pudieron en tela de juicio la constitucionalidad de la medida.
Varios juicios separados contra Berlusconi aún están pendientes, acusado de sobornar a un testigo de cometer perjurio en un caso, de fraude fiscal y otras irregularidades financieras en otro. Ambos juicios ya comenzaron, pero se suspendieron cuando la ley de inmunidad fue aprobada.
Berlusconi ha dicho en reiteradas ocasiones que esos juicios son por motivos políticos.
Un tercer caso contra el primer ministro, también relacionada con el fraude fiscal, está en etapas preliminares.
Berlusconi ha sido acusado en al menos 17 ocasiones, desde su primer cargo como primer ministro en 1994, pero sigue siendo muy popular entre el público italiano.
Con información de CNN.