A petición del gobierno de Guatemala y para mejorar las condiciones de vida que tenían sus connacionales en la franja fronteriza del ejido Nuevo Progreso, en Tenosique, Tabasco, donde se encontraban asentados desde agosto de 2011, el Instituto Nacional de Migración (INM) asistió a 140 migrantes guatemaltecos para que regresaron en forma ordenada a su lugar de origen.
La dependencia informó en un comunicado que como parte de los programas humanitarios que lleva a cabo la institución, las familias fueron asistidas para regresar a sus comunidades, debido a las condiciones insalubres en que permanecían, sin servicios básicos como agua, drenaje y luz. El personal del INM les brindó en todo momento alimentos, agua y atención médica.
En la acción realizada en coordinación con autoridades federales, estatales y municipales, así como organizaciones civiles y del gobierno de Guatemala, los extranjeros fueron trasladados al Puerto Fronterizo «El Ceibo», donde fueron recibidos por funcionarios de su país para luego conducirlos a los sitios donde residían.
El INM detalló que su personal agilizó los trámites migratorios y documentó la salida de 68 personas de nacionalidad guatemalteca que contaban con oficio de salida definitiva del país y de otros 72 que contaban con la Forma Migratoria de Visitante Local.
La institución informó que por encontrarse niños y niñas entre el grupo de centroamericanos, la Delegación Federal de Tabasco garantizó el cumplimiento del principio de unidad familiar, por lo que se requirió la presencia de Oficiales de Protección a la Infancia (OPI’S) en cada autobús utilizado durante el traslado al puerto fronterizo.
El secretario de Conflictos de Asuntos Agrarios de Guatemala, Axel Humberto López Anzueto, agradeció al gobierno mexicano, particularmente al INM por la forma en que se desarrollaron los trabajos y por las facilidades brindadas para el retorno ordenado de las familias guatemaltecas. BP
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