Como parte de los trabajos permanentes de monitoreo de la actividad del Volcán El Colima que lleva a cabo la Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos, este 08 de enero se realizó un sobrevuelo de observación del cono volcánico de dicho coloso a bordo del helicóptero “FENIX”, de esta dependencia.
Protección Civil Jalisco informó a Afmedios que la operación permitió la observación del domo volcánico que inició su crecimiento a partir de febrero de 2007 y estimar las medidas precautorias pertinentes para salvaguardar a la población asentada en las cercanías del volcán.
Como característica principal del sobrevuelo se destaca que se observan colapsos o derrumbes parciales de material desde la cima del volcán, principalmente hacia el sector oeste (hacia Zapotitlán de Vadillo).
Es importante señalar que dicho fenómeno se considera normal dentro del proceso eruptivo actual del Volcán de Fuego El Colima, sin embargo ante la característica vistosa del mismo, que provoca nubes de polvo por los desprendimientos de material proveniente del domo volcánico, se insiste en que por el momento LA ACTIVIDAD ACTUAL DEL COLOSO NO REPRESENTA UN RIESGO PARA LA POBLACIÓN ASENTADA EN LAS COMUNIDADES LOCALIZADAS ALREDEDOR DEL VOLCÁN.
Además se pudo constatar que en relación al domo volcánico NO SE OBSERVAN CAMBIOS EN LA ALTURA Y COBERTURA DE LA SUPERFICIE DEL CRÁTER, las cuales se mantienen en lo general con las características de lo observado en los sobrevuelos realizados desde el mes de marzo de 2010.
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Los distintos parámetros de medición que permanentemente se realizan a través del Observatorio Vulcanológico de la UEPCBJ ubicado en el Nevado de Colima, así como el análisis de dicha información por parte del personal Científico de Jalisco y Colima permiten las siguientes consideraciones:
1.- Que EL VOLCÁN COLIMA NO HA REGISTRADO CAMBIOS EN SU PATRÓN DE ACTIVIDAD CON RESPECTO A LOS ÚLTIMOS 9 MESES.
2.- Se observa que continuarán los derrumbes del material acumulado en los sectores sur (hacia Colima) y norte (hacia el Nevado Colima) y por desprendimiento de bloques en el sector oeste.
3.- El monitoreo permanente de los demás parámetros de actividad volcánica (sismicidad, temperatura, deformidad y química), se mantienen en niveles bajos y no presentan cambios en su comportamiento por lo que muestra una aparente estabilidad de la actividad volcánica, lo que representa que EN EL TÉRMINO DEL CORTO PLAZO NO SE PREVÉ LA PRESENCIA DE EVENTOS EXPLOSIVOS A GRAN ESCALA.
De tal manera el semáforo se mantiene en alerta (amarillo), continuando vigente la zona de exclusión que comprende un radio promedio de 7.5 kilómetros en torno al cráter.
Esta Unidad Estatal de Protección Civil y Bomberos insiste en las recomendaciones a la población para que definitivamente se evite acampar en laderas o barrancas y en las cercanías del volcán, además se continúa en alerta y en permanente vigilancia de la actividad del volcán para reaccionar de manera inmediata ante alguna eventualidad.
