Expertos de la ONU han alertado de que la sobreexplotación de los recursos hídricos en Uruguay está haciendo que el agua potable tenga cada vez niveles más altos de sal y piden al Gobierno que priorice el uso para consumo humano.

«Esta situación afecta significativamente a grupos vulnerables, como niños y adolescentes, mujeres embarazadas y personas que padecen enfermedades crónicas», explicaron los expertos.

Las autoridades de salud han reconocido el riesgo y han instado a los grupos vulnerables a comprar agua embotellada para beber. «Pero esto crea un riesgo de privatización de facto del agua para el consumo humano, obligando a la población a comprar agua», sostuvieron.

Los relatores advirtieron que, aunque los altos índices de sal se atribuyen al fallo de infraestructura hídrica, agravada por períodos anormalmente prolongados sin lluvias, el problema subyacente es la sobreexplotación del agua, especialmente por parte de algunas industrias en el país.

«Uruguay debe priorizar el consumo humano, tal como lo indican las normas internacionales de derechos humanos», dijeron.

Especialistas en la materia han estado advirtiendo durante años que la expansión de las concesiones a industrias intensivas en agua estaba llevando a la contaminación y escasez de agua en el país.

«El agua para el consumo humano representa apenas el 5% del suministro total de agua potable. Por lo tanto, no priorizar su uso es inaceptable», aseveraron los relatores.