UNIDAD DE ATENCIÓN A VICTIMAS DE VIOLENCIA POLÍTICA DE GÉNERO
Por: Mayahuel Hurtado
Existen agrupaciones que se caracterizan por defender los derechos de las mujeres, liderazgos femeninos que desde diferentes trincheras han buscado empoderar a las féminas y contribuir a erradicar la violencia de género; todos y todas ellas, buscan un mundo más justo, de mayores oportunidades, pero sobre todo, libre de violencia.
Lamentablemente existen personas que abrazando los ideales feministas y colgándose de salir en las fotos de diversas agrupaciones, caminan por la vida lacerando dignidades, abusando del uso de las redes sociales y en casos más severos, que rayan en la enfermedad, dañar la integridad moral y emocional de las mujeres, sin el menor pudor, sobre todo si ésta se desempeña en un cargo público, lo cual la hace visible y en cierta medida la limita a defenderse por el puesto que representa.
No son uno ni dos las desagradables situaciones en que una mente desquiciada, una persona resentida, sin valores, sin amor, sin respeto a la vida de los demás, ha cuestionado sin fundamento alguno el desarrollo profesional de una funcionaria y peor aún, ha tenido que inventar historias de vecindad, alimentadas del chisme de lavadero, de la calumnia, llenas de falsedad, que sólo buscan desgastar la imagen de una persona, para que pueda perjudicarle en el cargo o función que desempeña.
Estas acciones de violencia de género contra personas que se desempeñan en la función pública obedecen a diferentes motivos:
Hablaremos en primer orden de la competencia profesional, en donde se cuestiona el desempeño de la mujer porque representa un obstáculo para que un varón o una mujer pueda postularse para ocupar dicho cargo.
En segundo término obedece a cuestiones sentimentales, en donde la mujer es atacada por alguna persona que alterada en sus emociones comienza a relacionarla en situaciones que buscan perjudicarla, pero sin ningún fundamento, las acusaciones endebles tratan de sacar parte de su vida privada, de su intimidad; y valiéndose de las redes sociales usan cuentan buen configuradas en la privacidad o perfiles falsos para perjudicarla.
Por eso ayer se dio un gran paso en esos temas: Por acuerdo firmado entre la Comisión de Derechos Humanos del Estado de Colima (CDHEC) y la Asociación Plan V A.C., se constituirá la Unidad de Atención a Víctimas de Violencia Política por Razones de Género, la cual brindará asesoría y acompañamiento legal a las mujeres y, en su caso, tramitar la denuncia correspondiente.
Ayer lunes, el presidente de la CDHEC, Sabino Hermilo Flores Arias, firmó un convenio de colaboración con dicha Asociación con el objetivo de crear estrategias coordinadas a efecto de desarrollar actividades encaminadas a la protección, observancia, estudio, promoción y divulgación de los derechos humanos de las mujeres, a través de la atención, formación, capacitación, cultura e investigación.
La relación de la CDHEC con la unidad citada será de fortalecimiento y canalización en la gestión de casos de violencia política por razones de género, además de comprometerse a alojar el equipamiento de la unidad y otorgar todas las facilidades para el funcionamiento de ésta.
“El ombudsman resaltó que dicho convenio, que figura como el primero del año, presenta como instrumento legal la impartición de cursos, talleres, conferencias, pláticas y ponencias sobre temas de protección a los derechos humanos de las mujeres en el estado y la participación conjunta en actividades que incidan en el fortalecimiento de la cultura del respeto”.
Abraham Alejandro Lugo Chávez, presidente de la asociación civil, señaló que ésta se reforzará con la firma del convenio, en la promoción de la perspectiva de género y la difusión de información y acciones sobre la violencia a la mujer.
Esperemos, amable lector, lectora, que con estas acciones en beneficio de muchas mujeres, por fin puedan inhibirse aquellos casos de violencia política de género, mismos que se han ido incrementando de unos años a la fecha, derivado de la participación más notoria de las mujeres en la función pública, sobre todo si el cargo o puesto puede proyectarla para aspirar o contender en un cargo de elección popular, o bien si participa actualmente en política.
El tiempo es oro y estaremos atentas a que suceda la creación de esta Unidad y que se den a conocer las primeras denuncias, que definitivamente sentarán un precedente para inhibir la violencia en las mujeres, y que se les dé seguimiento, no podemos permitir que la violencia le reste brillo al papel tan importante que representa la mujer en la función pública.
