El presidente italiano Giorgio Napolitano pidió hoy respetar la decisión del cineasta Mario Monicelli, quien enfermo de cáncer terminal, el lunes se suicidó a los 95 años de edad.
“Se fue (Monicelli) con una última manifestación de su fuerte personalidad, de un impulso extremo de voluntad que es necesario respetar”, declaró Napolitano en la capilla ardiente instalada en el Palacio del Cinema de Roma.
Pero la decisión del cineasta, que se lanzó del quinto piso del hospital en el que estaba internado, causó polémica en el Parlamento.
La diputada Rita Bernardini, del Partido Radical, llamó a reflexionar sobre la manera en que “algunas personas que ya no pueden más se ven obligadas a dejar la vida, en vez de morir al lado de sus parientes cercanos con el método de la muerte dulce (la eutanasia)”.
Sin embargo, la legisladora Paola Binetti, de la Unión Democrática de Centro (UDC) exigió poner fin a la propaganda a favor de la eutanasia y opinó que Monicelli estaba “desesperado” y “fue dejado solo”.
Considerado el padre de la comedia italiana, con películas como “La gran guerra”, “I soliti ignotti” o “El marqués del Grillo”, Monicelli dirigió a actores de la talla de Marcello Mastroianni, Sofía Loren, Claudia Cardinale, Alberto Sordi, Ugo Tognazzi, Anna Magnani o Totó.
Este miércoles cientos de personas le dieron el último adiós en una ceremonia laica en su barrio de residencia, Monti, en el centro histórico de Roma, de donde fue después trasladado a la Casa del Cinema.
La familia anunció que el cuerpo de Monicelli (que padecía cáncer terminal de próstata) será cremado el jueves en forma estrictamente privada.
Con información de Notimex.
