Colima.- El agua que utilizan los más de 300 mil habitantes que viven en la zona conurbada Colima-Villa de Álvarez, proviene en su totalidad de Cerro Grande, por ello la fundación Manantlán pide crear conciencia.
Cerro Grande se encuentra a 25 kilómetros al noroeste de Colima y cuenta con 45 mil hectareas de extensión.
Sergio Graft señaló que aunque el beneficio de Cerro Grande es importante, aún es necesario crear conciencia en la población, y con ello realizar acciones que permitan, mantener la cantidad y calidad del agua que llega a los hogares de la zona.
El área es parte de la Reserva de la Biosfera Sierra de Manantlán, en los territorios de los municipios de Comala, Minatitlán y Tolimán.
“Esta montaña es reconocida como uno de los sitios más importantes para la conservación de la biodiversidad en el occidente del país. Es un área con muchos tipos de bosques, lo que hace que exista una gran riqueza biológica. Aquí encontramos especies únicas y bajo protección”, informó Sergio Graft, presidete de la Fundación Manantlán.
“Los bosques de Cerro Grande son los primeros en recibir las gotas de lluvia, que caen al suelo antes de infiltrarse e iniciar su camino subterráneo hasta los manantiales donde resurge”.
El ambiemtalista explicó que Cerro Grande está formado por roca caliza y en gran parte de su extensión hay un gran número de resumideros y cavernas, por donde se infiltra el agua a grandes profundidades a través de un sistema de arroyos subterráneos.
“Esta agua finalmente brota en manantiales como El Cóbano en Zacualpan, que abastece de mil litros por segundo de agua de excelente calidad a la zona metropolitana Colima-Villa de Álvarez, sosteniendo la economía de la ciudad y el bienestar de su población”, agregó.
“También es un lugar que nos brinda un espacio de esparcimiento y visita pública que disfrutamos con familia y amigos cuando visitamos lugares como El Terrero o los balnearios de Zacualpan y Agua Fría”.
Las actividades de extracción de madera, cultivos y el pastoreo de ganado están regulados por la Reserva.
Gracias a la colaboración y trabajo de las comunidades que habitan en Cerro Grande, esto ha controlado la sobreexplotación.
“Para mantener este vital recurso, debemos asegurarnos del buen uso de las tierras y bosques de esta gran montaña, asegurando que las futuras generaciones puedan gozar de una ciudad con abundante agua que les brinde bienestar”.
Las comunidades que habitan Cerro Grande han dejado de utilizar sus bosques en zonas que fueron definidas para conservación; por esta razón, los habitantes que dependen de actividades agropecuarias y forestales son afectadas debido a la protección de Cerro Grande, ya que no pueden seguir aprovechando sus tierras.
“La balanza esta en desequilibrio, mientras nosotros gozamos de agua abundante y limpia que nos da prosperidad; del otro lado, donde toda esa agua es captada de manera natural, viven personas en condiciones de alta marginación y sin acceso al preciado líquido”, explicó el investigador.
“Los costos de la conservación de esos bosques que a nosotros nos beneficia directamente en Colima y Villa de Álvarez, los pagan, las comunidades de Cerro Grande”.
Señaló que para asegurar la preservación de estos bosques, y así, el suministro de agua potable, es necesario externar el apoyo a las comunidades que allí habitan.
“Contribuyamos a que sus habitantes vivan con dignidad, aportando los recursos que permitan en Cerro Grande asegurar el mantenimiento de la calidad y cantidad de agua potable para la ciudad de Colima y Villa de Álvarez”, expresó.
“No perdamos Cerro Grande: ¡es nuestro seguro de vida! hagamos de Colima un ejemplo de solidaridad en la conservación de nuestros recursos y demostremos orgullosos nuestro esfuerzo compartido por alcanzar la sustentabilidad de nuestros bosques y ciudades, y el bienestar de toda su gente”.
Por su parte el banco HSBC otorgó un financiamiento económico para la Fundación Manantlán, que servirá para la conservación y vigilancia ambiental de Cerro Grande, Colima.
La Fundación presentó un proyecto nacional a través del Consejo Civil Mexicano de Silvicultura Sostenible.
El presupuesto otorgado es por un millón 400 mil pesos y se va aplicar en acciones de protección de bosques en todos las ejidos de Cerro Grande, 5 en Colima y 2 en Jalisco.
Además la Fundación Manantlán a presentado una propuesta al organismo operador de agua CIAPACOV con el que se pretende cobrar una cantidad de acuerdo al porcentaje de uso de cada vivienda que se usaría para la conservación de Cerro Grande.
Rodolfo Valdez, director general de CIAPACOV, informó a AFMEDIOS que la propuesta está en estudio y que en poco tiempo de podría señalar si es viable.
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