“Deben sentirse orgullosos al ser herederos de una tradición de grandes maestros de la medicina, una de las profesiones más antiguas del mundo, porque desde los tiempos del hombre primitivo se ha cuidado a los enfermos”, dijo ayer por la tarde el rector de la Universidad de Colima, Ramón Arturo Cedillo Nakay, al entregar su certificado de estudios a 89 egresados de la generación 2006-2012, de la Licenciatura de Médico Cirujano Partero de la Facultad de Medicina.
En el acto solemne realizado en el auditorio del plantel, Cedillo Nakay habló a los recién egresados sobre la constante evolución de la ciencia médica y la necesidad de mantenerse actualizados de manera permanente. A esto añadió la importancia de mantener la curiosidad como un valor importante en el profesional de la medicina, ya que “gracias a ella se han hecho los grandes descubrimientos de este mundo”.
El líder de los universitarios puntualizó que la humildad es otro de los valores que debe regir la ética del médico, “reconociendo los límites de nuestro propio conocimiento y, en dado caso, derivar al paciente con otro colega que esté más capacitado en determinada área. Si algo no lo saben, no tengan temor de decirle al paciente: déjeme estudiarlo, porque no es justo engañar a un paciente con un diagnóstico equivocado”.
El rector añadió que, a pesar de la alta demanda, la Universidad de Colima realiza cada año importantes esfuerzos por aceptar a la mayor cantidad de aspirantes a la carrera de medicina. “Es un fenómeno global –dijo– la alta dificultad y la gran demanda para el ingreso a este tipo de carreras, por lo que deben sentirse en una posición privilegiada al culminar sus estudios con éxito”.
Finalmente, señaló que también requiere un gran esfuerzo el camino para prepararse en un área médica y para acceder a un buen puesto de trabajo en los hospitales después de realizar alguna especialidad y sub-especialidad, por lo que “los más preparados y constantes en el estudio son los que tendrán éxito”.
Por su parte, el director de la Facultad de Medicina, Héctor Manuel Alvarado Banda dijo en su mensaje que “es de suma importancia para los médicos el momento en que se reconoce el esfuerzo y dedicación dentro de las aulas para convertirse en profesionistas con un alto sentido de ética, que atiendan los problemas de salud que no haya sido posible prevenir”.
En este sentido, aseguró que el asistir y tratar a un enfermo ha sido una de las actividades más antiguas de la humanidad, pues ya existen evidencias de esto en el Código de Hammurabi, que data de 1600 años a.C., y donde ya hacían recomendaciones para que, quien se dedicara a atender enfermos, tuviese cuidados especiales so pena de ser castigado.
Añadió que ahora la sociedad no otorga castigos, como cortar la mano del mal cirujano o el ojo del mal oftalmólogo. “Simplemente nos voltea la espalda o nos expone a procedimientos judiciales nada decorosos, por lo que nunca está de más mantenerse actualizados y conocer los códigos de ética médica a los que debemos apegarnos”.
En nombre de sus compañeros de generación, el egresado Santiago Alonso Cabrera Sandoval se manifestó seguro de que el panorama que la medicina ofrece a los egresados es más claro que al inicio de su carrera, pues ahora se abre una gama de infinitas posibilidades exitosas para cada uno de ellos. “Pensemos que, visto integralmente, no ha habido jamás tiempos mejores para la medicina que los actuales, puesto que de nosotros depende que ciencia y tecnología forjen un binomio ideal”.
Dijo también que es importante tener en cuenta al paciente como el eje rector de su estudio y su profesión y como el motor de su superación, que acude al médico con la motivación de restablecer su salud. “Nos permite conocerlo y comprender su vida. No lo defraudemos, brindémosle auténtico respeto, atención de calidad y con calidez”.
Finalmente, Santiago Cabrera extendió un reconocimiento a sus familiares por el apoyo incondicional, y a sus profesores que en aulas y campos clínicos transfirieron sus conocimientos y experiencias proporcionándoles un enfoque científico, ético y humanista. “Llevemos con orgullo, siempre, ser egresados de la Facultad de Medicina de la Universidad de Colima”.
Al acto asistieron también el secretario General de la UdeC, Christian Torres Ortiz Zermeño; el delegado Regional del Campus Colima, Alejandro López Silva y el sub-director de la Facultad de Medicina, Emilio Prieto Días Chávez.{jathumbnail off}
