Corea del Norte enfrenta una situación desfavorable, pero el férreo control del régimen evitará cualquier levantamiento al estilo de los países árabes, alertó un alto funcionario surcoreano.
El ministro surcoreano de Defensa, Kim Kwan-jin, señaló que «la situación en el Norte es desfavorable y cualquier cosa puede suceder allí», reportó este miércoles la agencia surcoreana de noticias Yonhap.
«Podemos considerar que tal vez la Revolución de los Jazmines podría encontrar su camino en Corea del Norte», agregó el ministro, en referencia a las revueltas populares que derrocaron a los gobernantes autocráticos del norte de Africa.
Sin embargo, «en el pasado, cuando los coreanos-japoneses entraron en el Norte, no sucedió mucho allí porque el régimen tenía un estricto control sobre sus ciudadanos. Y creo que el Norte todavía mantiene un fuerte control», observó.
El Norte atraviesa una severa crisis económica, problema que se ha agravado por los recientes desastres naturales y una mala gestión administrativa a mediados de la década de 1990.
El país sufre una persistente escasez de alimentos y más de seis millones de personas de los 24 millones de norcoreanos necesitan urgentemente ayuda alimentaria, según la Organización de Naciones Unidas (ONU).
La Comisión Europea donó a principios de mes 10 millones de euros (14.54 millones de dólares) en ayuda alimentaria para Corea del Norte, ante la oposición de Corea del Sur y a las dudas de Estados Unidos sobre los pedidos de asistencia de Pyongyang.
Con información de Milenio
