La autonomía del Poder Judicial

A Propósito
Por: Fernando Moreno Peña

El presidente AMLO ha mantenido una actitud de critica permanente y de descalificación a los órganos autónomos del Estado mexicano, entre ellos el Instituto Nacional Electoral (INE), el Tribunal Federal Electoral (TEPJF) y la Suprema Corte de Justicia de la Nación y ha negado la validez de los datos del INEGI y Coneval por no serle favorables a su gobierno.

1.- El INE ha demostrado con la impecable organización de las elecciones del 6 de junio y la organización de la consulta popular del 1 de agosto, que es un árbitro electoral que actúa conforme a la ley, que fortalece la democracia y que su desempeño arbitral es reconocido por la mayoría de los mexicanos.

Durante la campaña electoral, el presidente AMLO y Morena amenazaron con eliminar el INE y continúan haciéndolo, porque no se ha sometido al poder presidencial y al partido en el poder. El INE ha triunfado y se ha consolidado y no va a desaparecer.

2.- El Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, ha sido sometido desde el gobierno a fuertes presiones y su expresidente, José Luis Vargas, apoyador oficioso de la intervención presidencial, ha sido destituido por sus compañeros magistrados, recobrando este tribunal su autonomía y decoro.

3.- La contundencia y seriedad técnica del INEGI y del Coneval, han hecho prevalecer la veracidad de su información y la autonomía e independencia en su desempeño.

4.- La Suprema Corte de Justicia de la Nación, está superando el acoso y las intenciones injerencistas del ejecutivo, pero no así su descalificación y crítica permanente.

Estos órganos autónomos, así como el Poder Judicial, han hecho valer su autonomía e independencia del poder ejecutivo y eso ha molestado mucho al titular del ejecutivo y así lo ha expresado el mismo presidente AMLO, al señalar que el INE y el Tribunal Electoral están en contra de la democracia y que el Poder Judicial está podrido.

El Poder Judicial de la Federación

Hace unos días, el presidente de la SCJN, ministro Arturo Zaldívar, hizo un anunció importante: “Quiero informar que concluiré mi mandato como presidente de la Suprema Corte de Justicia de la Nación el 31 de diciembre de 2022, cuando termina el periodo para el cual fui electo por mis compañeros y compañeras ministros”.

“Ayer le comenté al presidente AMLO mi decisión, como una deferencia al apoyo que ha dado a la renovación del Poder Judicial de la Federación y él me expresó su respeto a mi decisión. Mi único compromiso ha sido, es y será con la Constitución y con los derechos humanos de las personas y por una mejor justicia para la gente”.

El ministro de la Corte, Fernando Franco González Salas, elaboró un proyecto para determinar si era Constitucional o inconstitucional el artículo 13 transitorio, el cual será sometido a los ministros de la Corte, aunque ya circuló y se sabe que será votado por unanimidad por los 10 ministros.

El proyecto de sentencia es contundente: “Ese transitorio resulta antinómico de lo expresamente señalado en los citados preceptos constitucionales, violentando con ello los principios de supremacía constitucional, jerarquía normativa, división de poderes, autonomía e independencia judicial de esos órganos del Poder Judicial”.

“Al tratar de modificarse en un artículo transitorio de una ley secundaria los periodos de duración del cargo de los funcionarios de más alto rango dentro del Poder Judicial de la Federación, establecidos directamente en la Constitución, sin que exista alguna habilitación por parte del Constituyente para ello, el legislador federal violenta lo dispuesto en la ley fundamental, al violar las normas que señalan los periodos de duración de esos cargos”.

Este proyecto de resolución que será aprobado en el Pleno de la Corte, consideró infundada la “irregularidad” de intentar ampliar el mandato de Zaldívar como presidente de la Corte, con lo que se evidencia la actitud injerencista del presidente AMLO y la aprobación del transitorio 13 que aprobaron con su mayoría diputados y senadores de Morena, a todas luces en contra de la Constitución y violando la autonomía del Poder Judicial, a quien corresponde única y exclusivamente determinar quien preside la Corte.

La molestia del presidente

Esto, desde luego, molestó al presidente de la república porque se cancela el regalo que el presidente y las bancadas de Morena diputados y senadores habían otorgado al ministro Zaldívar, de prolongar dos años más su periodo como presidente de la Corte.

La molestia del presidente se expresó de inmediato al llamar falsarios e hipócritas a los ministros que se opusieron al transitorio de la reforma judicial, con el que se pretendía que Zaldívar presidiera la Corte hasta el 2024.

“El poder judicial está podrido, echado a perder, adolece de corrupción, de nepotismo, y están aburguesados. Los jueces no representan al pueblo y a la verdad”, aseguró el presidente AMLO.

“Se requieren ciudadanos honestos, íntegros en todo el Poder Judicial, en el Poder Ejecutivo, en el Poder Legislativo”.

“Hay excepciones honrosas, no representan al pueblo y, la verdad, la Corte sigue siendo la Suprema Corte si acaso del derecho, pero no de la justicia”.

“Son muchos los intereses, porque siempre dominaban al Poder Judicial, entonces no quieren que se acabe con la corrupción, con el nepotismo en el Poder Judicial”.

El presidente AMLO lamentó que el ministro Zaldívar no podrá realizar la limpieza de corrupción con la que están de acuerdo los demás ministros

El presidente AMLO manifestó que “Arturo Zaldívar Lelo de Larrea, presidente de la Corte (SCJN), fue avasallado por sus compañeros ministros que vienen del antiguo régimen en su intento por reformar al Poder Judicial, no quieren a Zaldívar porque él si es honesto y ellos no”.

“En el Poder Judicial hay mucha hipocresía y son muy falsarios, y aseguró que los ministros del Máximo Tribunal estaban acostumbrados a servirle a los potentados y no al pueblo”.

Imaginen ustedes si el presidente Calderón o Peña Nieto hubieran expresado los insultos y descalificaciones que AMLO hace a diario sobre el Poder Judicial, lo más seguro es que ya los hubieran enjuiciado.

La politóloga María Amparo Cazar publicó en el periódico Excélsior lo siguiente: “El expresidente Calderón dijo en 2011: No es que yo la traiga contra los jueces; al contrario, los aprecio y todo. Pero ya también empieza uno a cansarse, mano. Uno los agarra y los agarra y los agarra y los agarra (a los delincuentes), y los sacan y los sacan y los sacan”.

“Calderón fue duramente criticado incluso fue señalado por la Corte Interamericana de los Derechos Humanos por criticar públicamente a los jueces. El Consejo de la Judicatura Federal (CJF) exigió no acusar a los jueces sin tener argumentos y defendió el actuar de los impartidores de justicia. El entonces presidente de la SC, Silva Meza, solicitó a Calderón enviarle pruebas de actos de corrupción si las tenía. La hoy secretaria de Gobernación y en ese momento ministra de la SC, Olga Sánchez Cordero, defendió la actuación de los jueces y le regresó la bolita al Ejecutivo. También habló de la necesidad de “no socavar las instituciones de impartición de justicia”.

Los tiempos, las circunstancias y las personas cambian. Hoy, Olga Sánchez Cordero guarda un vergonzoso silencio respecto de estos insultos cotidianos contra los Ministros de la Suprema Corte de Justicia de la Nación lanzados por su jefe, el presidente AMLO.

La dignidad, las convicciones y la congruencia han sido echadas a un lado.

Después del resultado de las elecciones del 6 de junio, donde Morena y sus aliados no mantuvieron la mayoría calificada en la Cámara de Diputados y el fracaso de Morena en la consulta popular, los órganos autónomos y el poder Judicial han hecho valer su independencia y autonomía y con ello se fortalece la democracia y el Estado de Derecho.