Ciudad de México.- Este viernes 15 de noviembre inicia formalmente el proceso de consulta para la construcción del Tren Maya con la publicación de la convocatoria en el Diario Oficial de la Federación, informó Rogelio Jiménez Pons, director general del Fondo Nacional de Fomento al Turismo (Fonatur).
Esta mañana, durante la conferencia de prensa matutina, el presidente Andrés Manuel López Obrador aseveró que si las comunidades indígenas deciden que no se construya el proyecto, no se hará.
“Si la gente dice: ‘No’, ahí quedó, hasta ahí llegamos, el pueblo manda. ¿Por qué lo hacemos así? Por la democracia, pero además porque le tenemos mucha confianza al pueblo.”
El mandatario destacó que respetarán la voluntad de los ciudadanos, aunque recordó que ya se previó en el presupuesto para que “no falten los recursos necesarios”.
Recordó que las obras previstas en su administración deberán estar concluidas dentro del periodo que abarca su mandato, para no “dejar pendientes” a las administraciones posteriores.
“Queremos cumplir con todo el procedimiento para terminarlo en tres, a más tardar, cuatro años para tenerlo concluido”.
Por su parte, el director de Fonatur informó que han tenido múltiples reuniones en la zona y con académicos, universidades, estudiantes y comunidades de la región.
Reiteró que para la construcción del tren maya se usarán los derechos de vía existentes, vías férreas, de transmisión eléctrica y carreteras, donde se estima una inversión total de 120 mil millones de pesos y con impacto para 12 millones de habitantes y 17 millones de turistas al año.
“El Tren Maya, como insistimos, es una oportunidad para saldar la deuda histórica del país con el sureste de México.”
Los factores fundamentales del proyecto son el ordenamiento territorial, la planeación con participación ciudadana, el respeto al medio ambiente y la inclusión social, promover un modelo de desarrollo territorial equilibrado y sostenible para conectar a las comunidades, garantizar el derecho de espacio público y a la movilidad, así como generar oportunidades equitativas para las comunidades.
En relación al medio ambiente se pretende utilizar los derechos de vía existente, aplicar programas como Sembrando Vida, construir pasos de fauna y proteger los corredores biológicos, proteger los recursos hídricos y acuíferos, respetar las reservas ambientales e implementar sistemas de alerta de sobre la vía para protección de la fauna.
Del desarrollo económico se busca integrar a las comunidades a cadenas productivas y generar valor agregado a sus productos, además de incorporar a pequeños productores de campo a nuevos mercados, reducir los costos de transportación, aumentar la conectividad digital, facilitar el acceso a los mercados laborales y generar nuevas oportunidades económicas.
En torno al patrimonio cultural se respetarán y promoverán las tradiciones y expresiones que identifican a los pueblos originarios, facilitará el acceso a múltiples zonas arqueológicas y poblaciones de valor turístico, impulsará la creación de rutas gastronómicas y artesanales, promoverá prácticas sustentables y formas alternativas de turismo, además de redistribuir los flujos turísticos por toda la región.
El presidente López detalló que, en caso de que se apruebe, primero licitarán las vías férreas y posteriormente se comprarán los trenes, el equipo rodante y las estaciones.
Por su parte, Jiménez Pons presentó el mapa donde muestra los 40 municipios del sureste de México por donde transitará el Tren y los 160 ejidos que atravesará.
Adelfo Regino, titular del Instituto Nacional de los Pueblos Indígenas (INPI) explicó que la consulta se hará en diálogo directo con las comunidades por lo que están convocando a las autoridades ejidales, comunales y las tradicionales.
Al momento han ubicado alrededor de tres mil 425 localidades indígenas con 40 por ciento y más de población indígena, que son los destinatarios de este proceso de consulta.
A fines de mes, el 29 y 30 de noviembre, se realizarán 15 asambleas informativas en un primer momento; después, las comunidades reflexionarán la información que se les proporcione en sus reuniones, en sus asambleas respectivas; y un tercer momento será ya la asamblea consultiva que se realizará el día 14 y 15 de diciembre.
Esta última fecha coincidirá con el ejercicio de participación ciudadana coordinada por la subsecretaría de desarrollo democrático, participación social y asuntos religiosos, Diana Álvarez; y al final, las asambleas definirán mecanismos de seguimiento que serán definidos por las propias autoridades participantes.
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