México.- El peso inicia la sesión con una apreciación de 0.13% o 2.7 centavos, cotizando alrededor de 20.70 pesos por dólar, con el tipo de cambio tocando un mínimo de 20.6533 y un máximo de 20.7666 pesos.

El peso se ubica como la segunda divisa más apreciada en el mercado cambiario, aunque esto es resultado de una corrección a la fuerte caída de las seis sesiones previas, algo que era esperado. Entre los principales cruces del dólar se observa un desempeño mixto, con el índice ponderado del dólar estadounidense avanzando de forma moderada con 0.05%.

En el mercado de capitales continúan observándose pérdidas, con los principales índices de Europa retrocediendo en promedio 0.58%, mientras que en Estados Unidos el mercado de futuro muestra que podrían registrarse caídas en la apertura, principalmente en emisoras del sector tecnológico, con el Nasdaq registrando un retroceso de 1.51%.

Lo anterior indica que el mercado sigue especulando que la economía se recuperará a un ritmo acelerado, lo que podría propiciar presiones inflacionarias y una postura menos flexible por parte de la Reserva Federal. Las caídas son mayores en emisoras del sector tecnológico pues fueron las más beneficiadas durante la pandemia. En el mercado de bonos las tasas de interés se mantienen estables, con la tasa de los bonos del Tesoro a 10 años ubicándose alrededor de 1.36%.

El mercado está a la espera de que el presidente de la Reserva Federal, Jerome Powell, presente el informe semestral del Banco Central y de un testimonio ante el Comité Bancario en el Senado. Es probable que reitere la postura ampliamente flexible de la Reserva Federal y la ausencia de riesgos inflacionarios en el corto plazo. En la sesión, el desempeño del tipo de cambio dependerá de la reacción del mercado a los comentarios de Powell. En sesiones posteriores, sigue habiendo riesgos al alza para el tipo de cambio, pues los principales determinantes de la depreciación del peso son internos.

La Encuesta Nacional de Empresas Constructoras (ENEC) de diciembre mostró que el valor de la producción de la construcción se contrajo a una tasa mensual de 0.49% de acuerdo con cifras ajustadas por estacionalidad, acumulando tres meses consecutivos a la baja. En términos anuales, mostró una contracción de 22.55%, hilando 30 meses de retrocesos consecutivos.

La construcción ha sido de los sectores más golpeados por la crisis sanitaria, pues durante la etapa más estricta del confinamiento (abril), el sector se vio obligado a suspender en su totalidad actividades.

Si bien, a partir de la segunda mitad de mayo fue catalogada como esencial, el rebote fue modesto en los meses posteriores debido a la incertidumbre que generaba el rumbo de la pandemia. Con ello, en el 2020 el valor de la producción de la construcción de acuerdo con la ENEC registró una caída promedio anual de 24.83%, superando la caída del 2019 de 8.14% y sumando ocho años consecutivos de contracciones.

En cuanto al valor de la producción por subsector en cifras originales, los tres subsectores cerraron el año con fuertes caídas anuales, donde las obras de ingeniería civil continúan rezagándose con una caída anual de 26.47%, tras disminuir 25.73% en noviembre.

Los trabajos de ingeniería civil se han visto afectados por los retrasos en los proyectos insignia del gobierno, el Tren Maya y Dos Bocas, debido a paros por parte de los trabajadores ante las malas condiciones laborales en la construcción de la refinería y los bloqueos jurídicos por posibles daños ambientales en la zona del Tren Maya.

Por su parte, los trabajos especializados para la construcción registraron una contracción anual de 21.77%, superior al retroceso de 19.04% en noviembre. Mientras tanto, la edificación cayó a una tasa anual de 19.29% (Vs. -23.21% en noviembre). Cabe recordar que, la construcción del sector privado sigue siendo considerada como una actividad esencial, por lo que el regreso a rojo en el semáforo epidemiológico de 6 estados a finales del año pasado probablemente tuvo un impacto negativo en la edificación.

A nivel estatal, únicamente 8 de las 32 entidades del país mostraron un crecimiento anual en su valor de producción durante diciembre. Entre las entidades con mayores avances anuales destacan Oaxaca (327.50%), Sinaloa (63.75%) y Tabasco (60.66%), recordando que Oaxaca estuvo afectado por sismos importantes hace un año, frenando la construcción en el estado, por lo que el crecimiento se debe a una baja base de comparación. Por su parte, el valor de la producción en Tabasco ha sido apoyado por la construcción de la Refinería Dos Bocas y ya hila cinco meses de avances anuales consecutivos.

De hecho, Oaxaca y Tabasco son las dos entidades que mostraron un mayor crecimiento promedio anual en el 2020, con 92.04% y 20.81%, respectivamente. No obstante, estas entidades únicamente representan el 6.4% del valor de la producción total del sector constructor del país.

Por su parte, Nuevo León, estado que representa el mayor porcentaje de la producción total (12.4%), logró promediar un crecimiento anual de 1.61% en el 2020, muy por debajo del promedio del 2019 de 6.44%. Específicamente en diciembre, el valor de la producción de Nuevo León mostró una caída anual de 11.94%, siendo su mayor contracción desde abril del 2020.

Hacia adelante, se espera que las entidades del sur-sureste del país sigan siendo impulsadas por los grandes proyectos como el Tren Maya y la Refinería Dos Bocas. En cuanto a los estados del norte, la Cámara Mexicana de la Industria de la Construcción (CMIC) señaló que están apostando por la inversión privada para impulsar el sector en esta región.

Para el 2021, a pesar de que el presupuesto del gobierno federal tiene un incremento en inversión física de 10.23% con respecto al 2020, podría no ser suficiente para reactivar la construcción, pues la incertidumbre doméstica que predomina en el país no genera las condiciones óptimas para fomentar la inversión y con ello la construcción, destacando:

1) El rezago en la campaña de vacunación. México ha aplicado al 21 de febrero 1.31 dosis por cada 100 habitantes, lo que ocasionaría una lenta normalización de la actividad económica.

2) La implementación de políticas económicas poco ortodoxas como la aprobación en el Congreso de la Ley Eléctrica, la cual pretende darle prioridad al despacho de energía a la Comisión Federal de Electricidad (CFE), afectando aún más la inversión en la construcción del sector energético.

3) La falta de una política fiscal expansiva. Diversas empresas se han quedado sin recursos para invertir en construcción. Lo anterior, se ha visto reflejado en la cartera vigente al sector privado no bancario, donde las empresas relacionadas con la construcción presentaron una contracción anual real de 11.5% en el 2020, luego de contraerse 6.9% en el 2019.

Cabe agregar que hoy se votará en la Cámara de Diputados la reforma a la Ley de la Industria Eléctrica que tiene como objetivo dar prioridad al estado por encima de particulares en el sector, lo que podría tener afectaciones negativas por incrementos en tarifas para consumidores y presiones sobre las finanzas públicas. Cabe recordar que la reforma fue aprobada en comisiones el pasado viernes 19 de febrero.

Durante la sesión, se espera que el tipo de cambio cotice entre 20.62 y 20.85 pesos por dólar. El euro inicia la sesión con una depreciación de 0.12%, cotizando en 1.2143 dólares por euro, mientras que la libra avanza 0.01% y cotiza en 1.4064 dólares por libra.