ESTACIÓN SUFRAGIO

Por: Adalberto Carvajal

Los destapes de AMLO

En su visita a Colima como parte de la gira de agradecimiento, el presidente electo Andrés Manuel López Obrador envió diferentes mensajes a los de casa y a los de enfrente.

A estos últimos, a quienes como el gobernador Ignacio Peralta respaldaron proyectos políticos distintos al del Movimiento de Regeneración Nacional, les ofreció un esquema de colaboración que podría llevar, se dijo oficialmente, a erradicar la pobreza extrema en la entidad.

Los ciudadanos esperaríamos que de una asociación entre el próximo gobierno federal y el actual gobierno del estado surjan otros beneficios, como cancelar la concesión de la caseta de peaje en Cuyutlán o abrir a la brevedad la nueva universidad en Armería.

A los de casa, a quienes lo acompañaron en la campaña electoral como candidatos de Morena y de sus partidos aliados, les dejó en claro que son cuadros distinguidos del régimen de la Cuarta Transformación los dos senadores de mayoría, las diputadas federales por los dos distritos, los congresistas locales, los cuatro alcaldes y sus regidores, incluidos los que son ediles de oposición en su respectivo ayuntamiento.

Y que para Colima, más que grandes obras de infraestructura habrá dinero en programas sociales: becas de estudio y apoyos económicos a los jóvenes en su primer empleo, pensiones a los discapacitados y a los adultos mayores, subsidios al campo y precios de garantía; todo dentro de un esquema de austeridad gubernamental.

Por la lluvia intermitente, el mitin en la Piedra Lisa que debía ser un acto masivo se redujo a un evento de postcampaña. Probablemente esa era la intención ya que, según la lectura que hicieron algunos analistas de la información, AMLO quiso aprovechar el acto para destapar en familia a Mario Delgado como su candidato a la gubernatura en 2021.

DELGADO E INDIRA:

En todo caso, esa tarde hubo dos destapes: el de Mario, a quien López Obrador presentó como un colimense que es coordinador de Morena en la Cámara de Diputados y será muy útil para bajar recursos al estado; y el de Indira Vizcaíno, de quien reiteró Andrés Manuel será la representante del Gobierno Federal en Colima a partir del 1 de diciembre, es decir, la funcionaria que aplicará esos recursos.

AMLO no ignora que es demasiado pronto para hacer futurismo. Sus menciones especiales a estos dos diputados federales se debieron seguramente a otros motivos.
Manos anónimas lanzaron “fuego amigo” contra la representante del segunda distrito, otra vez con la cantaleta de “Lady Altozano”. Por eso había que respaldarla.

Y el reconocimiento a Delgado Carrillo era importante porque ya lo ha enviado en varias ocasiones como delegado político especial para tratar de poner orden entre las huestes morenistas… y no le hacen caso.

Especulando, se puede inferir que ante la incomodidad de mencionar a Claudia Yáñez Centeno, la diputada federal por el primer distrito, luego del escándalo desatado por la boda fifí de su hermano César en Puebla, el presidente electo invocó a Mario Delgado para no dejar sola a Indira en el aparador.

Hablar de una sola diputada se habría interpretado como un predestape, con el riesgo de poner a Vizcaíno Silva en la mira de los francotiradores. Tenía que proteger a Indira de los reproches de quienes están celosos por su nombramiento adelantado como superdelegada federal, aunque eso la convierta en víctima del canibalismo político.

EN LIGAS MAYORES:

Morena tiene por lo menos ocho aspirantes naturales a la candidatura a la gubernatura en 2021.

Mario Delgado y César Yáñez, por supuesto, ya que los dos han estado cerca de López Obrador.

No importa si la verdadera aspiración de Mario es suceder a Claudia Sheinbaum en la jefatura de Gobierno de la Ciudad de México, y cuente para ello con el apoyo de Marcelo Ebrard.

El anunciado canciller en el nuevo gobierno buscará sin duda la Presidencia en 2024. Y podría negociar ceder en este proyecto frente a Sheinbaum, a cambio de conseguir la candidatura capitalina para Delgado.

Por su parte, más que gobernador de Colima, Mario Delgado ve más factible ser secretario de Estado cuando termine la legislatura federal, dada la necesidad que tendrá AMLO de conseguir ministros de refresco para un gabinete poblado por adultos mayores que no soportarán la friega que les espera.

Y al finalizar el sexenio, si no se logra el sueño de gobernar la CDMX, Mario bien podría ser de nueva cuenta senador.

Tampoco importa que en varias tribunas pidan la remoción de César Yáñez por haber contradicho en los hechos la austeridad republicana prometida por López Obrador.

El anunciado coordinador de Política y Gobierno ha sido el colaborador más leal de Andrés Manuel desde antes de 2006, y aunque tenga que esconderlo el futuro Presidente no se deshará de él.

DEL SENADO PARA EL MUNDO:

Los dos senadores también son candidateables. Empezando por Joel Padilla que ese mismo día lunes recibió un baldazo de agua fría al hacer público Andrés Manuel que su administración financiará los cendis del Partido del Trabajo, pero a cambio los absorberá como parte de la estructura de la SEP.

Que nadie se engañe con la exigencia de un perfil electoral rentable. A Padilla Peña no le preocupa haber llegado al Senado por la inercia de la candidatura presidencial. En 2021 el PT buscará hacer efectiva su cuota de poder y el estado donde le pueden otorgar la postulación a Gobernador es Colima.

Pagar a un aliado su contribución a la campaña de 2018 y acaso sus votos en el plebiscito sobre la revocación del mandato, puede ser más importante para el régimen de AMLO que ganar la elección de Colima en tres años.

Su compañera de fórmula, Griselda Valencia de la Mora, tiene ante sí la gran oportunidad de usar el escaño que ganó por mayoría de votos para proyectarse como una estadista.
Ella puede capitalizar el cargo en la política nacional o invertir su nominal capital político como semilla de una carrera en la vida pública de Colima.

LA CABALLADA ESTÁ GORDA:

Por lo demás, la caballada de Morena no está flaca: pertenecen a esta cuadra también las dos diputadas federales, Claudia Yáñez e Indira Vizcaíno, la alcaldesa de Manzanillo, Griselda Martínez, y el edil de Tecomán, Elías Lozano.

Como dicen en la política, los ocho tienen boleto. De cómo lo usen y si les alcance para alcanzar la nominación de Morena al Gobierno del Estado en 2021, ya lo veremos.
Por lo pronto, en una siguiente entrega abordaremos las circunstancias de los últimos cuatro de esta lista.

Mi correo electrónico: carvajalberber@gmail.com. Esta columna también se puede leer en: www.carvajalberber.com y sus redes sociales.