La diferencia entre la foto de la izquierda y la de la derecha no es que en la primera estaba abierta la puerta de la nevera y de tanto frío el fotógrafo se ha puesto a temblar.
La diferencia es que la instantánea ha sido sometida por Microsoft a un proceso de corrección que gracias a un algoritmo matemático y en conjunción con sensores de movimiento corrige los temblores de ese pulso que tienes como para ir a robar panderetas, consiguiendo un resultado final estable y nítido. ¿Deseas saber más?
Gracias a una tecnología similar a la que permite detectar los movimientos en el iPhone, mediante el uso de giroscopios y acelerómetros, Microsoft ha desarrollado un sistema que calcula los movimientos que realiza la cámara en las manos del fotógrafo, a veces imperceptibles, corrigiéndolos para contrarrestar las fotografías que salen borrosas, movidas o con falta de nitidez.
Teniendo en cuenta esos movimientos, se calcula la imagen que se pretendía obtener de haber permanecido la cámara inmóvil, compensando esos temblores.
En el actual estado de desarrollo de esta tecnología el sensor es aún un dispositivo abultado externo a la cámara, pero se está trabajando en miniaturizar dichos componentes e integrarlos en la propia cámara. ─Antonio Rentero [Microsoft Research]
