Colima.- Raúl Arámbula Mendoza, director del Centro Universitario de Estudios e Investigaciones de Vulcanología de la Universidad de Colima, informó que dos de las cuatro estaciones de monitoreo del volcán de Colima se instalarán a partir del próximo lunes 3 de abril.
En entrevista con AFmedios, el investigador señaló que el resto de los equipos serán colocados después de semana de pascua.
“Se piensan instalar a 5 y 10 kilómetros de distancia del cráter del volcán, esto es para poder acceder en cualquier momento a las estaciones sin que perdamos los datos de ellas como ocurre con las que están cerca y que en época de lluvias es difícil acceder a esos sitios”.
Las nuevas estaciones se montarán sobre una plancha de concreto y contarán con páneles solares que alimentarán las baterías de los sismógrafos.
Proporcionarán mil 200 datos por segundo adicionales a los que ya generan las seis estaciones de banda ancha y tres más de corta vida con que ya cuenta la red sismológica.
Los datos serán enviados al Centro Universitario de Estudios e Investigaciones de Vulcanología de la Universidad de Colima, y compartidos con las Unidades de Protección Civil de Jalisco y Colima, y con el Centro Nacional de Prevención de Desastres (CENAPRED).
La ventaja
Las nuevas estaciones, informó Arámbula Mendoza, permitirán detectar pequeños sismos que son generados en el edificio volcánico por el movimiento de magma. De esta manera, habrá mayor información para detectar cambios en la actividad del volcán de Colima.
“Esos pequeños sismos son importantes porque en algunas erupciones de otros volcanes, esos sismos pueden indicar que viene nuevo magma o un volumen mucho mayor de magma”.
Además, en caso de una erupción de gran magnitud, las estaciones cercanas al volcán (de 2 a 5 kilómetros del cráter) quedarían destruidas, por lo que las nuevas permitirán continuar el monitoreo de la actividad volcánica.
Se prevé que a finales de abril o principios de mayo comiencen a proporcionar información.
El volcán de Colima, recordó, se encuentra en una etapa estable, y aunque en el exterior muestra pocas explosiones y plumas de gases, en el interior sigue activo.
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