Los hombres que duermen poco durante la semana tienen un riesgo elevado de desarrollar diabetes tipo 2. Pero si compensan el sábado y domingo durmiendo un poco más, logran disminuir este peligro.
Peter Liu, endocrinólogo de la Universidad de California, Los Angeles (Estados Unidos) que condujo el estudio, explica que «todos sabemos que debemos dormir lo suficiente pero muchas veces es imposible por las demandas del trabajo y el estilo de vida ocupado. Nuestro estudio encontró que extender las horas de sueño puede mejorar la utilización de la insulina en el cuerpo, disminuyendo el riesgo de desarrollar diabetes tipo 2 en los hombres adultos».
SUEÑO COMPENSATORIO
Liu trabajó con hombres que durante la semana debían dormir pocas horas debido a las exigencias de su trabajo. Tenían un promedio de 29 años de edad, no sufrían diabetes y llevaban varios años durmiendo 6 horas en los días laborales. Los investigadores los invitaron a pasar dos fines de semana en el laboratorio, de manera que en la primera tanda durmieron 10 horas sin interrupciones y en la segunda solo descansaron 6 horas.
Durante la estadía en el laboratorio, todos los hombres consumieron los mismos alimentos. Al terminar cada fin de semana, los expertos les hicieron un examen de sangre en ayunas de cada voluntario con el fin de medir su resistencia a la insulina.
Los especialistas notaron que las 10 horas de sueño mejoraron considerablemente la sensibilidad a la insulina de los participantes. Lui afirma que «la buena noticia es que extendiendo las horas de descanso, los hombres que no duermen lo suficiente durante la semana pueden mejorar la sensibilidad a la insulina». De esta forma, explica, logran disminuir el riesgo de sufrir diabetes tipo 2. {jathumbnail off}