El ministro del Interior de la provincia de Sindh, Manzoor Wasan, señaló hoy que la violencia étnica en los barrios de Malir y Khokhrapar de la estratégica ciudad de Karachi, en el sur de Pakistán, dejó 14 personas muertas y al menos diez heridas.
Un intercambio de disparos de armas de fuego entre dos grupos rivales en el área de Malir aumentó la tensión temprano en la mañana de este viernes ante el temor de que se propague a otros barrios de Karachi, capital de Sindh.
Los muertos y los heridos fueron trasladados a varios centros de atención médica y al hospital Jinnah, mientras la policía y grupos paramilitares conocidos como Rangers han llegado a tomar el control de la situación.
Tiendas, oficinas gubernamentales y mercados de la zona fueron cerrados tras el choque armado, reportó el canal paquistaní de noticias Dawn News.
El ministro del Interior confirmó que la policía ha sido enviada a las zonas afectadas, mientras que se han girado las órdenes para desplegar a los Rangers.
Wasan instó a todos los partidos políticos e instituciones desempeñar su función de restablecer la paz en la ciudad.
Karachi es la ciudad más diversa de Pakistán, pero también la más violenta al registrar en forma constante batallas citadinas que ponen de manifiesto las profundas divisiones étnicas, políticas y sectarias.
Los últimos incidentes se producen tras un incremento en la violencia étnica y política en Karachi la semana pasada, que se ha cobrado más de 100 muertos.
El pasado 14 de julio, una nueva ola de violencia sacudió a Karachi, la capital comercial de Pakistán, dejando un saldo de 14 muertos en unos enfrentamientos desatados por las críticas de un destacado líder del partido en el gobierno al grupo político dominante en la ciudad.
Con información de Notimex
