Colima y sus terremotos

Por José Luis Larios García*

El Archivo Histórico del Municipio de Colima (AHMC), tiene el gusto de presentar la exposición Colima y sus terremotos, en la que podrán apreciar datos interesantes de los sismos más recordados y documentados en la historia de Colima.

Se exhiben informes de las autoridades del Ayuntamiento, actas de cabildo, correspondencia oficial, noticias del periódico oficial El Estado de Colima, decretos, listas de damnificados, solicitudes de apoyo, fotografías, entre otros.

Existen pocos registros documentales o crónicas de viajeros que nos indiquen información precisa de los terremotos en Colima. De acuerdo con Juan Oseguera Velásquez, el primer temblor de que se tiene noticia, ocurrió el 27 de mayo de 1563. Los documentos virreinales muestran escasas evidencias de afectaciones o desastres asociados con sismos.

Por ejemplo, en 1682, las autoridades del Ayuntamiento “hacen saber que la gente de la villa de Colima se encuentra desconsolada por el estado en que se encuentran sus casas que se están cayendo y no hay quien les ayude a repararlas”, pues dos años antes, en 1680, se había suscitado un movimiento telúrico, que arruinó gran parte de las fincas.

Se hace un recorrido a partir de los primeros años del siglo XIX, ya que, en el acervo del Archivo Histórico del Municipio de Colima, se resguardan expedientes que detallan los estragos y acontecimientos derivado de los temblores. Además, se exhiben escritos del terremoto del 25 marzo de 1806, conocido como el sismo de “La Encarnación”, en donde la torre del campanario de la iglesia parroquial (hoy Catedral Basílica de Colima) quedó desplomada y abierta en varias partes.

Expediente relativo al terremoto del 25 de marzo de 1806

Podrán apreciar cuentas de gastos para reconstrucción de edificios públicos, dañados a causa del temblor del 31 de mayo de 1818, que sacudió la tierra de los pueblos de Colima y su región. Ese día, las Casas Reales y la iglesia parroquial padecieron daños, igualmente conventos, viviendas y las capillas de La Soledad y Dulce Nombre de Jesús. En las estadísticas recabadas en los libros de entierros del Archivo Histórico de la Parroquia de San Felipe de Jesús, se contabilizaron 90 víctimas sólo en la villa de Colima.

La recopilación de documentos exhibidos en la Casa del Archivo, muestra información relevante de los movimientos telúricos más devastadores para la ciudad de Colima. El primer año del siglo XX fue recibido con un fuerte temblor, ocurrido el 19 de enero de 1900, con magnitud de 6.5 en escala Richter. Otras fuentes como la del Centro Nacional de Prevención de Desastre (CENAPRED), señala que fue de 7.9 grados. Suceso que causó cuantiosos daños a viviendas, escuelas y edificios públicos.

Con el tiempo se registraron otros temblores de grandes proporciones, como el acontecido en la madrugada del 3 de junio de 1932. Según fuentes del CENAPERD, fue de 8.1 grados Richter, repitiéndose los días 18 y 22 del mismo mes. El último sismo ocasionó un “Tsunami”, que destruyó hoteles y casas del pueblo de Cuyutlán.

Nueve años después, el 15 de abril de 1941, un temblor con magnitud de 7.6 en la escala de Richter, sacudió al estado de Colima.

De acuerdo a lo señalado por el cabildo del Ayuntamiento de Colima, el intenso terremoto fue a las 13 horas “causó no menos de 28 víctimas, así como la destrucción total de la ciudad, pues puede asegurarse que no menos de 95% de las casas y edificios quedaron, si no completamente derribados”, o inhabitables, figurando entre los más afectados, “la Iglesia Catedral, el Palacio de Gobierno del Estado, el Palacio Federal, la Iglesia de San José, el Templo de la Merced, el de San Felipe de Jesús”.

Beatriz Bracamontes, deduce que fue muy impactante para la población “ver destruidas algunas de sus construcciones más emblemáticas, como las religiosas que representaban cierta protección divina”.

Calle Francisco I. Madero después del terremoto del 15 de abril de 1941

En la segunda mitad del siglo XX, podemos considerar el sismo del 30 de enero de 1973, iniciándose a las 3 de la tarde, con magnitud de 7.6, el cual ocasionó daños considerables como los precedidos. Sin embargo el 9 de octubre de 1995 a las 9:36 de la mañana, se registró un fuerte temblor de 7.5 grados en la escala de Richter. El municipio de Manzanillo fue el más afectado, donde se cayó el hotel Costa Real y otros perjuicios a las vías de comunicación, dejando al menos 49 muertos.

Por último, el terremoto del 21 de enero de 2003 es el más conmemorado en la actualidad. A las 20: 06 horas se sacudió con gran fuerza la tierra de Colima, con magnitud de 7.6 en la escala de Richter. Parecía que el tiempo se detuvo sin avisar; la noche apenas comenzaba, fue una de las más largas para muchos colimenses. Al día siguiente, las noticias de los daños que dejó el siniestro corrían rápidamente —aún no existían las redes sociales—, y afirmaban que “Colima estaba en desastre total”.

Escombro de viviendas dañadas con el terremoto del 21 de enero de 2003

El sismo se sintió en todo el estado, causó afectaciones como corte de suministro de energía, derrumbes en carreteras, cerros y desplome de edificios o viviendas, principalmente en el centro de la capital. Cientos de casas fueron derribadas y, otras tantas, terminadas de demoler por el Ejército Mexicano.

*Investigador del Archivo Histórico del Municipio de Colima